Página:Julio César (1921).djvu/49

Esta página ha sido corregida
43

que se hallaban junto a mí, exclamaron: "¡Ay qué buen alma!", y le perdonaron de todo corazón. Pero de ésos no hay que hacer caso. Si César hubiese apuñalado a sus madres no habrían dicho menos.

BRUTO

¿Y fue entonces cuando se marchó así, tan abatido?

CASCA

Sí.

CASIO

¿Dijo algo Cicerón?

CASCA

Sí, habló en griego.

CASIO

¿Con qué fin?

CASCA

Pues que no os mire más a la cara si puedo decirlo; pero los que le entendieron se sonreían, moviendo la cabeza. En cuanto a mí, aquello estaba