al objeto. Con que unos y otros, por firmes en su sentir, se veen comprehendidos en la pena de Horacio:
Y han dejado a Chile hecho un horrible Monstruo, causa de aborrecerle los que no le han habitado, y aun de no mirarle de buen semblante los que le habitan por no averle registrado. Ya sale con mexor fortuna o con su nativa belleza. Puede ser no sean tan espantosos sus lexos, aunque lo es su guerra. Y siendo assi que el escritor le ha mexorado fortuna, avivando al retrato las colores, se queda con la desgracia, pues siendo verdad que es probervio vulgar la sentencia de el Comico: Nil dictum, quin prius dictum: o mexor el Padre de las ciencias Augustino: Stamina et fila non numquam ponunt priores, vt. posteriores vestem inde conficiant. An tramado los anteriores tan mal el estambre o urdido tan sin concierto la tela, que todo ha sido confundir ilos y confundir ebras. Con que en mi sentir las anteriores pisadas han sido huellas en arena que el haliento de quien examina curioso la verdad las ha borrado. Tendrá, pues, el Auctor, si la desgracia de no hallar huella segura donde afirmar la planta, la gloria de ser el primero que ha sacado de este Reyno verdadera historia. Y que ha sacado de las sombras de el olvido a la Luz de el conocimiento hechos tan memorables y varones tan Ilustres en las dos conquistas, temporal y espiritual I es merito singular fixar el pie donde no halla alguna estampa de pie humano, y hazer presentes meritos y hechos que el tiempo avia ya trasladado de la otra banda de el olvido. Assi lo blasonó Horacio:
Libdra per vacuum posui vestigia princeps
Non aliena meo pressi pede.
Esta gloria se merece el Auctor por singular, y a la obra se debe la attencion mas desvelada por verdadera (que es el primer fundamento de la historia), por sentenciosa en el estylo, por exquiita en la erudicion, y por el todo de perfeccion que la adorna muchas acclamaciones, y Chile repetidos agradecimientos de que es deudor a su Paternidad y a toda su eminente Religion, que ha sido en este Reyno el Gayan que a sus ombros ha llebado el trabaxo de enderezar las plantas quando tiernas, de cultivarlas quando adultas, de conservarlas en la misma rectitud quando ancianas. Qué indio por Rebelde no ablandó su corazon a la efficacia de su palabra? Quién llegó al conocimiento de N. Fee en estas partes que no lo deba al fervoroso zelo destos dilegentissimos operarios y exercitados soldados de la milicia espiritual? Quién tiene sabiduria que no la haya bebido de la fuente perenne de estos Maestros? Para todos es necessaria esta sagrada milicia. Y en todo he visto exercitarse al M. R. P. Diego de Rosales: en las missiones y conversion de los infieles con admirable fruto, en el pulpito con general aplauso, en el confesonario con conocidos logros, en los gobiernos de dos veces Vice Provincial y dos Rector con singular prudencia y aceptacion comun, y en todo tan igual, que: Plurima sunt, sed pauca dico. Reservo al silencio lo mas por no hazer lo menos, o déxolo todo por no hacer contraria a mi sentir su modestia, y passo a pedir a su Paternidad M. R. que apresure el passo a que salga a luz esta historia, para que se imprima, no en papel que rasga el tiempo, si en laminas de bronce que prevalece contra el olvido. Que yo, en nombre de mí Patria, diré al Auctor de agradecido lo que en otra occasion dixo Angelo Politano de obligado: "Quam curan si non molesto animo pro amico sumpseris, habebis me profecto laudum in primis tuarun vocalissimun precemem, atque omni tempore memorie tue clarissime non ingratum; aut sane non frigidum debitorem. Assi lo siento en este convento de N. Sra. de el Rosario de Santiago de Chile, en 4 de Enero de 1666.