Los Toquis generales son justicias, y como los Romanos usaban llebar por delante unas hachas y unas varas que llamaban faces et falaces, assi estos tienen por insignia unas achas, no de yerro, sino de pedernal enastadas en un palo, como las faces consulares, insignias de su dignidad. Y aunque estos indios, usando del poder absoluto o disoluto, castigan los delitos por si mismos o los vengan, lo ordinario es comparecer ante los Toquis generales y caciques y pedir cada uno su justicia y alegar de ella, y con acuerdo de todos dar sentencia, ya de muerte al hechizero por homicida que mata a otros con veneno, ya que pague el que mató a yerro peleando en sus borracheras con llancas, ya castigando al ladron y al adultero. Y lo ordinario es condenándole en que pague lo hurtado y satisfaga el agravio que hizo al marido con la hazienda, y quando no la tiene obligando a que paguen por él sus parientes. Y de un cacique a otro suelen embiar sus requisitorias pidiendo la satisfaccion de los agravios o las pagas de los hurtos, y aunque no tienen escribanos ni citan por escrito, embian sus ñudos o sus flechas, que son como las cartas citatorias.
Y en no dando la satisfaccion debida lo reducen a las armas, que es lo que los principes y las repúblicas politicas usan, tomando la satisfaccion con las armas quando las unas citadas no guardan a las otras la justicia debida. Y para estas guerras eligen los Toquis generales, con acuerdo de los demas caciques, capitanes generales y los demas oficiales, como se ha visto; sacan sus estandartes, que son las cabezas, y plantan sus toquis, flechas y lanzas, que es el mejor juicio y la mejor justicia, como escribió el rey de Francia en una grande pieza de artilleria que hizo fundir poniendo en ella este letrero: Optimum judicium, que fué decir: el mejor tribunal y donde mexor se da a cada uno su derecho: es en la sentencia de esta pieza y con el poder de las armas que con ellas conserva uno lo que es suyo y recobra lo que le han quitado, mexor que con los textos y las leyes.
Los sacerdotes o Boqui-buyes que diximos tiene esta nacion, son un remedo de los sacerdotes que instituyó Numa Pompilio, a quienes llamaban Feciales, que, como refiere Aulogelio y Plutarco en la vida de Numa, les pertenecia el confirmar la paz o el abrir la guerra. Feciales quidam pacis custodes abre ipsa nomen accipientes, ab his necesserat initium belli. Assi estos indios, mientras visten el trage que arriba se dixo en el capitulo de los Boqui-buyes y están en su enserramiento, no puede ninguno mover guerra, y de su consejo y determinacion pende el conservar la paz y el abrir la guerra. Y como los Feciales trahian habito sacerdotal y la verbena en la mano, assi trahen estos Boqui-buyes habito largo, cabellera, corona y laminas en la cabeza, petoral de llancas en el pecho, y en las manos el ramo de canelo, insignia de paz.
En otras muchas cosas observan muchos ritos y ceremonias que usaron naciones muy capazes y politicas. Sea una el matar una oveja quando capitulan pazes. De Abran refiere la Sagrada Escritura que celebrando la confederacion de amistad, con Dios, le mandó que partiesse una baca y un carnero y assi mismo una cabra. Y explicando esta ceremonia Nicolas de Lira, dice: que era costumbre de muchas naciones, quando capitulaban pazes entre si, dividir una res por medio y passar por alli los que se confederaban, para dar a entender que los que quebrantassen las pazes merecian ser divididos como aquella res. Y esto mismo quieren significar estos indios matando la oveja de la tierra y sa-