Página:Historia de las sociedades secretas, antiguas y modernas en España y especialmente de la Francmasonería - Tomo I.pdf/72

Esta página no ha sido corregida

dos por un rayo del cielo. En primer término un francmasón con su mandil , compás v escuadra, se arranca con rabia los pelos y la redecilla. La otra representa la medalla acuñada por los frailes franciscos con motivo del Capítulo general que celebraron en Roma en 1750. Al describirlo dice, que el rayo que derriba la francmasonería es la Bula de Benedicto XIV, que despues publica. Allí advierte, que en la Gaceta había salido un juicio dogmático-moral sobre cinco proposiciones masónicas, de que no hacia caso, pues sabía que no eran opiniones masónicas. A la pág. 10 trae la cifra de los francmasones descubierta, en una lámina igual á la que algunos años despues publicó el abate Barruel. Trae también el decreto de 1751, entónces reciente. El Padre Torrubia había viajado por Francia é Italia, y cita las obras masónicas publicadas hacia 1745 y 47. Lejos de haberse inscrito como francmasón y denunciado que hubiese en España noventa lógias, se infiere de su narración la falsedad de esto. Oigamos al mismo P. Torrubia: «Oí decir a un francmasón en París que tenian ya trescientas ocho lógias conocidas. Lo cierto es que el año 1735 sólo nos dieron razon de ciento veinte y nueve en una tabla, donde las figuraron magníficamente, con sus antigüedades y blasones, empezando en el núm. 1.° con la de Lugdale Street, y colocando en el ciento veinte y nueve la de Plimouth.» (Pág. 45).

"Cuando estuve en Italia pude conseguir una copia legítima do esta notable pieza (la Pastoral de Mons. Justiniani). Se que muchos españoles, por falta de instruccion sobre este punto, han prevaricado con el comercio preciso que tienen con los francmasones en el giro que hacen por el mundo, así en las colonias extranjeras de la India Oriental, que frecuentan nuestros filipinos, como especialmente en las de la Occidental, Jamáica, Nueva-Orleans... Grandes insidias se preparan en todas estas partes á nuestros españoles pasajeros, estimando los francmasones más agregar así á uno de nuestra nacion, que á cinco de otra,» (Pag. 52 y 53) (1).

Esta narracion sencilla no se aviene con la supuesta iniciacion y las quiméricas noventa logias de España.

Veamos ahora el real decreto de 2 de Julio de 1751 prohibiendo la francmasonería, como cosa ya existente en España (2). Copiárnoslo del impreso que se conserva en la biblioteca de la Real Academia de la Historia, que es el de la edicion oficial.

__________________

(1) Este pasaje está copiado de la cuarta edicion : en la primera dice lo mismo, con algunas pequeñas variantes, y está sin foliar.

(2) La redacción de este documento es bastante desgraciada: se imprime con su propia ortografía. El P. Torrubia le insertó a la pag. 71 de su libro, con alguna ligera variante: en lugar de francmasones escribe france-masones.