eſtrellas del cruzero, diziendo, que ſu reſplandor, y hermoſura es belliſſima, y lucidiſſimo en aquellas partes el Camino dela Via lactea. Todo eſto es de eſtos Autores.
Pedro Theodoro peritiſſimo Piloto, y Aſtrologo cuenta en particular las eſtrellas que ſon proprias de aquel hemisferio, y las catorce figuras, que de ellas ſe componen. La primera es el Camaleon, que conſta de diez eſtrellas. La ſegunda el Aſpid Indico, que ſe compone de quatro. La tercera el peje volador, que contiene ſiete. formaſe de cinco la quarta, que llaman pejedorado, y de quince la quinta que ſe dize Hidro. La ave Toucan, que es la ſexta, tiene ocho, y la Fenix que es la ſeptima, encierra catorce. Venſe trece en la Grulla, que es la octaua, y en la Paloma de Noe, que es la nona aparecen once; el Indio ſagitario, que es la dezima ſe compone de doce, y el Pauo, que es la vndecima de diez y ſeis; la Ave del paraiſo que es la duodecima, y la llaman Maaucodiatam, ſe forma de doçe; y el triangulo de cinco, que es la decimatercia. Vltimamente ſe ven en el cruçero quatro, que forman la cruz, y vna que con otra pequeñita que ſe le arrima, haze el pie en hermoſiſſima proporcion, compas, y figura, y aunque eſte cruzero ſirue alos nauegantes de guia en el mar del Sur como la Cynoſura ſirue de lo meſmo alos del mar del Norte, no eſtas immediato al Polo, antes le hazen diſtante de el treinta grados; pero como no ay otras eſtrellas de ſu grandeza mas proximas a el, ſirue del meſmo effecto, aunque no en quanto ala aguja, porque eſta ora ſea en el mar del Norte, ora en el del Sur, ſiempre mira al Norte ſin embargo de eſtar interpueſto alos que eſtan en el mar del Sur, o todo el glouo dela tierra, o gran parte.
Segun el circulo que haze el Cruzero parece que viene apuntar el punto fixo del Polo entre dos como nubes, aunque no lo ſon ſino vnos agregados de eſtrellas tan pequeñitas, que no ſe diſtinguen, como en la Via lactea, y ſiempre eſtan fixas ſin mudarſe, y quando mas claro, y ſereno eſta el cielo reſplandecen mas, y estan mas hermoſas, otras eſtrellas ay mas proximas a eſtas nubes, pero como no ſon tan grandes como las del Cruzero, no ſe haze cuenta de ellas, ſino ſolamente de eſtas, que verdaderamente ſon hermoſiſſimas, y brillan con gran viueça. no dexaran de guſtar de verlas en eſtampa los que no las han viſto en ſu nacimiento y lugar, y aſſi pongo aquí eſtas vltimas en la manera, y forma que alli ſe ven.
CAPITVLO XXI.
Delos animales aſſi proprios como aduenedizos del Reyno de Chile, y delas piedras bezares.
Delos animales aſſi proprios como aduenedizos del Reyno de Chile, y delas piedras bezares.
H
Aſta que llegaron los Eſpañoles a aquellas partes dela America no ſe hauian viſto jamas en ella bacas, Cauallos, Carneros, Puercos, Gatos caſſeros, ni Conejos aſſi miſmo caſſeros, ni los campeſinos de Europa, ni perros, ſino ſolo los que llamamos Gozques, no los caſtizos para las Caſſerias y ni Galgos, ni Podencos, Perdigueros, Perros de agua, y de mueſtra, ni Sabueſos de trailla, o monteros, no Lebreles, ni Maztines para el ganado, ni los perrillos, que llamamos de falda, no Cabras, ni jumentos, pero deſpues que entraron en Chile, y començaron a criarſe eſtos ganados, como hallaron la tierra tan a propoſito para ſu multiplico, ſe han aumentado de manera, que no ay oy coſa mas ſobrada, no ſolo para el ſuſtento dela vida humana ſino para la delos otros animales, que ſe ſuſtentan de carne, pues como vimos en los capitulos paſſados es tanta la que ſobra y ſe deſperdicia al tiẽpo delas matanças, que es meneſter quemarla y hecharla enlos Rios, y lagunas a los peces para q̃ no corrompan el ayre, y lo que en otras partes ſe tiene por calamidad, y deſtruicion del pais, que es quãdo viene alguna peſte, que mata el ganado, eſſo meſmo ſe ſuele juzgar en Chile neceſſario para ſu remedio. Parece eſto paradoxa, o coſa increible; y no es ſino ponderacion de muy entendidos acreditada con la experiencia, porque como ay tanto ganado, y la tierra es tan pingue, y fertil, q̃, lo haze engordar de manera, q̃