Página:Histórica relación del Reyno de Chile.djvu/438

Esta página ha sido corregida
349
DEL REYNO DE CHILE

ſe pudieran contar otros caſos ſemejantes, que cadadia acontecen en que nueſtro Señor mueſtra manifieſtamẽte ſu diuina prouidencia, y los efectos de ſu diuina predeſtinacion, con harto con ſuelo delos que toma por inſtrumẽtos para obrarlos. Mas adelante ſe tocaran algunos, entre otros, de que ſe harà capitulo aparte: aora baſte eſte paraque de el ſe colijan los demas, los quales, y el gran prouecho, que ſe ha hecho a estas almas con eſtos baptiſmos ſubconditione, mueſtran bien claro hauer ſido penſamiento del cielo el que al meſmo tiempo, y en partes tan diſtantes vnas de otras deſpertò en los ſieruos de nueſtro Señor vna queſtion, y duda de que ſe le ha ſeguido tan grande gloria, y bien alas almas.

Eſto es lo que toca al miniſterio delos Indios, y morenos en los colegios; digamos aora algo delos ſeminarios, y convictorios. El de Santiago le fundò el padre Diego de Torres arriba nombrado luego que fundò la Prouincia del Paraguay, y començo a gobernarla. Començo eſte collegio aflorecer deſde ſus principios con tan extraordinarios exemplos de virtud, que los colegiales, particularmente algunos mas ſeñalados, parecian en ſu recogimiento, y modeſtia, y en la oracion y mortificacion, en que ſe exercitauan, vnos muy exactos nouicios, y de hecho lo fueron muchos de ellos que entraron entonces en nueſtra Compañia, y en otras ſagradas religiones.

Informando el dicho Padre Prouincial Diego de Torres a nueſtro M. R. P. General Claudio Aquaviua de buena memoria delos buenos naturales, y capacidad de los que nacen en aquel Reyno, aſſi para las letras, como para la virtud, y dela experiencia, que delo vno, y lo otro ſe hauia hecho con la fundacion de eſte collegio dize aſſi en la carta anua del año de 1612. [ami ver vno delos mayores frutos, y mas calificados ſeruicios que han hecho los hijos dela Compañia ala Mageſtad de nuestro Señor, es, el que cogen en eſte collegio, pues del depende el bien de toda eſta tierra, en criarles ſus hijos con el recogimiento, y virtud, que ſi fueran religioſos, de que no es pequeña mueſtra el hablar en ſus converſaciones y recreaciones de Dios nueſtro Señor con la facilidad, que ſi lo fueran, y hazer ſus mortificaciones en el refetorio, pedir les digan las faltas, y otras coſas de mucho conſuelo, y aunque es verdad que yo he visto colegios, y ſeminarios dela Compañia en diuerſas partes, pero ningunos hazen ventaja a eſte, y es que alo que eſpero, quiere nueſtro Señor hazer vn Iardin muy agradable aſus ojos en eſte Reyno, y regarlo con agua, y ſangre, como ſe ha començado ya a hazer con muchas oraciones, y lagrimas; y con la ſangre de nueſtros dichoſos padres eſte año paſſado, y entiendo no ha de parar aì, y por eſſo crio eſtos niños, para que entrando en religion ayuden a alabarle con trabajos y con ſus vidas. Y aſſi eſpara dar gracias a nueſtro Señor ver con el deſſeo, y anſias, que entran algunos en la Compañia, con deſſeo de imitar a eſtos padres, que han muerto aora los Indios; y el ver tan buena diſpoſicion en ellos ha ſido la cauſa de hauerme alargado en receuir en la Compañia mas delos que penſe al principio, pues en poco mas de vn año ſe han receuido diez y ſeis de eſte colegio] haſta aqui el capitulo de eſta carta el qual he repetido tan por extenſo, por la grande autoridad, eſpiritu, y opinion de ſantidad del que le eſcriuio.

Deſpues aca ſe ha conſeruado ſiempre eſte colegio de manera, que nunca ha dexado de dar muy buenos ſugetos ala Compañia, y alas demas ſagradas religiones, y en el tienen los nueſtros muy honeſto, y prouechoſo empleo atendiendo ala enſeñança en letras, y policia chriſtiana, y cultiuo eſpiritual delos colegiales, con el aſſeo, y puntualidad, que acoſtumbra en todos los demas, que tienen aſu cargo. confieſſan, y comulgan de regla los collegiales cada quince dias, y para eſto van en comunidad ala Ygleſia dela Compañia con grande edificacion del pueblo, por la modeſtia, con que van por las calles ſin hablar, ni vagear de vna parte a otra, y lo meſmo obſeruan ſiempre, que ſalen de caſa. Quando van alas Ygleſias, ſe previenen aſſientos, paraque eſten con la deuida decencia, y aſſi ſon
eſti-