que pretendio fortificarſe en ella el año de 43. la qual hauiendo ſalido de Fernambuco con tres nauios, vna vrca, y vn patache, otros dizen, diez, otros quince vaſos, a cargo de Henrrique Brum Gouernador, que era del Braſil, y de Compañia del general, y Principe de Oranje, con ſuficientes pertrechos, y gente de guerra, y mar, quatrocientos carretoncillos, nouenta y dos pieças de artilleria, treinta, y quatro de bronce, y cinquenta y ocho de fierro, y otras prevenciones neceſſarias (aunque los ſoldados ni Capitanes no ſabian los deſignios del general, ni a donde ſe endereçaua eſta nauegacion) deſambocaron por el eſtrecho de Magallanes, ſegun me eſcriben algunos, otros, no dizen por donde entrò, pero dizen, que nauegaron por altura de ſetenta, y ſetenta y dos grados, lo qual hauiendo deſembocado por el eſtrecho de Magallanes) no pudo ſer, ſino por cauſa de alguna tormenta, que deſpues de deſembocados, los arrogaſſe al polo, como acontecio al Draque, y queda referido en ſu lugar, porque para ir a Valdiuia, a donde lleuauan ſu derrota, ſeria voluer atras, ſubir a tanta altura.
No hauiendo podido hiuernar en la Ysla de San Bernaue, o Bernabelte, como ellos dizen, por el rigor delas nieues, y frios, que por eſtar en tanta altura eran inſufribles, hizieron vela, y baxaron a Chile, hauiendo perdido la vrca, que venia mas intereſſada de armas de fuego, picas, poluora, plomo, y otros pertrechos de guerra, y armas, palas, azadones picos, hachas, y fraguas, con oficiales de todas las artes neceſſarias para el intento, y ſobre todo la comida, que traian en ella, ſe hallaron obligados a ayunar; porque ſegun la relacion, que dio el Olandes Iuan Antonio natural de Velduque, aquien cautiuaron con otros en Chiloe, ſe quitò a cada vno vna libra de racion cada ſemana, haſta que llegaron a Chiloe, donde ſe proveyeron para adelante, aunque ſiempre padecieron mucho trabajo. En eſta Ysla de Chiloe tomaron puerto a ſeis de Mayo de quarenta y tres, en el que llaman del Yngles, veinte leguas del de Carelmapo, q̃ es el dela ciudad de Caſtro. Hauiendo hecho aqui ſeñal la Capitana, abrio el general vn pliego delante de todos, en el qual ſe le mandaua por orden del Conde Mauricio, de quien dicho general Henrrique Brun hauia ſido almirante, que con aquella gente dieſſe principio ala poblacion tan deſſeada, y pretendida tantos años ha del famoſo puerto, ciudad, y Rio de Valdiuia; y que luego que alli ſe huuieſſe fortificado, deſpachaſſe dos nauios con ſolos marineros, y gente de la mar, paraque ſe le embiaſſe el ſocorro de ſiete mil hombres, que eſtauan apunto en el Braſil para ir a ayudarlos, y hazerſe inexpugnables en aquel ſitio; porque ſu intento era hazerſe ſeñores de Chile, y del Perù, y por lo menos, fortalezerſe en aquel pueſto, y tomar juntamente el de Coquimbo, para ſer dueños de todas aquellas coſtas, haſta Panamà, y de alli correr alas de Mexico, y Philipinas.
No lo lleuauan mal diſcurrido, ſi tuuieran mas de ſu parte a Dios, que aunque tal vez les permite ſalir con lo que deſſean, y los toma por açote para caſtigar como padre aſus fieles, y catholicos; les desbaratò eſta vez todos ſus deſignios de manera, que por mas, que forcejaron contra la corriente, no pudieron prevalecer. Cautiuaronles en eſte puerto algunos por orden del Maeſſe de Campo de Chiloe, que les hechò vna emboſcada de ſeis Eſpañoles, y haſta ocho, o diez Indios; y aunque el general Henrrique Brum irritado de eſte ſucceſſo deſpachò el dia ſiguiente vn nauio al puerto de Carelmapu, y quemaron en el, vno de vn particular, que hallaron alli cargado; y hechando en tierra vna tropa de moſqueteros, nos mataron algunos delos nueſtros; deſtruyeron las Ygleſias, alancearon los ſantos, y hizierõ otros deſtroços proprios de ſu impiedad; tomò Dios vengança de ellos, quitando alli la vida al dicho general Henrrique, y matandolos de hambre en el Rio, y puerto de Valdiuia, adonde vltimamente llegaron para fortificarſe en el como pretendian. Començaron de hecho a menear las manos, y leuantar las tres fortificaciones, y en la que hizieron en la Ysla, que llaman de