Página:Histórica relación del Reyno de Chile.djvu/337

Esta página ha sido corregida
296
BREVE RELACION

Dios ſus deſignios quitandole la vida, y deshaziendo juntamente con ella toda la armaçon de ſus bien fundados intentos, que fue para Chile vna perdida muy de llorar, porque verdaderamente era eſte gran Capitan, grande en todo, en ſu ſangre en ſu valentia, en ſu nombre adquirido con tan grandes hazañas en las guerras de Europa, antes de paſſar alas de Chile, y en la buena traça; y diſpoſicion de ſu acertado gouierno. Dexò vn hijo, que es el Capitan Don Iorge de Riuera, cauallero del habito de Santiago, heredero, no de ſus haziendas (porq̃ el cuydado, y aplicacion, que tuuo ſiempre al ſeruicio del Rey, no le dio lugar a atender aſus particulares medras e intereſes) ſino de ſus grandes meritos, que le hazen digno de que ſu Mageſtad le honrre con los acrecentamientos, que aſſentaran muy bien en vn hijo de tal padre. Dexò tambien otras dos hijas, delas quales ſe casò vna con el licenciado Don Iuan Canſeco, preſidente, que murio de Guadalaxara en Mexico, perſona de tan gran prudencia conſejo, y letras, como lo mueſtran los grauiſſimos oficios, en que le tuuo ſiempre ocupado el Rey nueſtro Señor. La otra hija eſcogio la mejor parte, conſagrandoſe al Rey del Cielo, y tierra en el muy religioſo, y iluſtrifumo monaſterio, dela Concepcion de Santiago de Chile donde vive oy con muy grande exemplo, y muy conforme alas obligaciones de ſu eſclarecida ſangre; y con eſto paſſo adelante ſiguiendo el orden delos que fueron ſuccediendo en el gouierno de aquel Reyno.

Deſpues dela muerte del gouernador Alonſo de Riuera, mientras proueia el Virrey, entrò en el gouierno el licenciado Fernando Talaberano, aquien tocaua eſte pueſto, por oidor mas antiguo, quera ala ſaçon dela Real Chancilleria de Santiago de Chile, y por particular nombramiento del dicho ſu anteceſſor, que antes de morir le dexò nombrado para ello. Gouernò el tiempo, que le tocò, con alabança de muchos, aquien honrrò, y la meſma le dieron otros, aquien hizo bien, ſiendo juez, y oydor; el qual eficio ſiruio muchos años con la ſatisfacion, entereza, y zelo, que experimentò aquel Reyno; donde finalmente murio dexando vna muy noble decendencia. No ſe que viuan oy ſino ſolas dos hijas de eſte iluſtre gouernador, delas quales la vna casò con el general Don Iuan de vega Baſan, que lo fue, ſi mal nome acuerdo, delos galeones dela plata, y deſpues, dela armada Eſpañola, que ſalio de Eſpaña para deſalojar del Braſil al enemigo Olandes, que hauia ocupado el puerto de Fernanbuco, y vltimamente voluio alas Indias el año de 43. con oficio de preſidente dela Real audiencia de Panamà, donde eſtà al preſente mereciendo maiores pueſtos, que aſentaran ſiempre muy bien ſobre ſu gran calidad y ſeruicios, y podran ſeruir juntamente de premio debido alos de ſu iluſtre fuegro, de cuyo gouierno no tengo al preſente materia, ſobre que añadir nada alo que tengo dicho por mayor, por la meſma cauſa, que otras vezes tengo alegada; otros habra, que referiran mas ala larga eſte gouierno, como lo hiziera yo tambien, ſi me hallara mas cerca dela fuente, que darà copioſa materia aios hiſtoriadores.

Al Gouernador Fernando de Talaberano ſuccedio el Gouernado Don Lope de Vlloa, nombrado para eſte oficio primero por el Virrey (era lo entõces el Principe de Eſquilache, que podia ſerlo de todo el mundo, por ſu eſclarecida nobleza, meritos, y talentos perſonales) y deſpues fue confirmado en el por ſu Mageſtad, en conſideracion de ſus grandes meritos, y por la gran calidad de ſu il luſtre ſangre tan conocida, y notoria en el Reyno de Galicia, donde tiene ſu caſa. Delos pueſtos, que eſte cauallero tuuo antes de eſte gouierno, no tengo ninguna noticia en particular; ſi bien ſupongo, q̃ dio en todos ellos la debida ſatisfaccion que le hizo el paſſo a eſte vltimo aſcenſo, el qual ſe le huuiera hecho aſſi meſmo a otros mayores, ſi la muerte no ſe huuiera atraueſado, para impedirlo. por eſta cauſa durò pocos años en ſu gouierno; pero ſe portò en el de manera, que de ſus buenos aciertos, y dela juſtificacion, con que procedio en todo, aſſi en las coſas de la guerra, como dela paz,
fe