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DEL REYNO DE CHILE
principios anduuo ſeguro el Alferez Melendez, mas lo andaran los padres con las prendas delas tres mugeres, e hijos de Anganamon; eſpecialmente, que como el no nos ha dado eſtas prendas, bien ſe le podian pedir algunas otras; y ſi el ſalieſſe a quererſe ir con los padres, dexando el ſeguro, que dexa; verdaderamente me parece que podrian ir ſin peligro. Con eſta entrada q̃ daremos todos ſatisfechos de que alos Indios ſe les ha repreſentado ſuficientemente aſſi las paçes, como el Euangelio: y quando por dos fines can altos, y por confeſſar, y conſolar aquellas, pobres captiuas, los Padres vaian con algun rieſgo, y aun quando mueran, es todo muy bien empleado, y no obraria menos ſu ſangre derramada por la ſaluacion de nueſtros Hermanos, que el buen ſucceſſo de ſu viaje, y ſalir con vida. Dentro, y fuera dela Compañia tenemos muchos exemplos, que imitar en eſta parte, y aſſi en el nombre dela Santiſſima Trinidad, y devajo de ſu proteccion, y dela Soberana Virgen, de nueſtro Santo Padre Ygnacio, patron de eſſas Prouincias, y delos Angeles de guarda de ellas, y dela ſanta obediencia, yo los ofreſco con ſummo goço, y conſuelo de mi alma; y oxala, que ala mia le cupiera empreſſa tan dichoſa: vueſtra Reuerencia les lea eſte capitulo, y comunicando el negocio, con el Senor Preſidente, con ſu beneplacito, y el parecer de vueſtra Reuerencia, aquien yo lo remito, como a verdadero dueño del negocio, y q̃ tiene las coſas preſentes, no hauiendo coſa que lo impida, vayan en el nombre del Señor, que no les faltaran compañeros, ſi ſe lo concedieramos, ni les faltaràn nueſtras pobres oraciones, penitencias, y ſacrificios, y paraque el tiempo, que gaſtaren en eſta glorioſa miſſion hagamos eſto con mas cuydado; por amor del Señor, que vueſtra Reuerencia nos auiſe del tiempo dela entrada, y ſalida delos Padres, con la breuedad poſſible, deſde aqui al nacimiento del Señor, aquien, ya ſu madre bendita pedimos eſte buẽ ſucceſſo en aginaldo; a eſte ſin ofrecemos cada dia dos miſſas, aiunos, diſiplinas; &c. Y cada vno de noſotros (que ſerà lo principal, paraque el Señor nos oyga) ſe procura renouar en eſpiritu, para alcançar con mas eficacia lo que ſe pretende. Por mas ſeguro, que pareſca eſte medio aunque fuera reuelado, puede ſer aya quien lo contradiga, y tanto mas, quanto el fuere mas comveniente; yo eſpero en. nueſtro Señor les darà al Señor Preſidente, y a vueſtra Reuerencia acierto, paraque ordenen lo que mas conuenga; y eſten ciertos ſu Señoria, y vueſtra Reuerencia, que quando no hauiera en la Prouincia mas que ellos dos padres, los ofreciera con la meſma liberalidad, que ſe los ofreſco, como lo hize deſde el principio, aun ſin ſaber, que vueſtra Reuerencia trataua de ello, y ſeñalando las miſmas perſonas, que alla eſtauan ſeñaladas, y eſto podra vueſtra Reuerencia hazer comunicar al Señor Preſidente. No digo todos los otros motiuos, y raçones, que nos han mouido a eſta reſolucion: porque vueſtra Reuerencia tiene los meſmos; ni hallo en contrario mas delas mormuraciones de muchos, q̃ por bien que ſucceda, les parecerà temeridad; y ſi murieſſen; que hauiamos ſido los authores dela perdicion del Reino; Pero tambien ſe eſcandilizaron otros, y tuuieron por ignorancia la muerte, y cruz del que es ſuma ſabiduria, y gloria. No por eſto contradigo otros motiuos, que la prudencia chriſtiana podra enſeñar a vueſtra Reuerẽcia, como quien tiene la coſa preſente, paraque no tenga eſte medio execucion, las quales de aca no podemos alcançar; el Señor, que es infinita bondad, y ſabiduria endereçe eſto, y lo demas aſu maior gloria, como todos le ſuplicamos, y no porque eſte medio ſucceda bien, o mal, le pareſca a vueſtra Reuerencia queda cerrada la puerta, paraque ſe puedan intentar otros, porque en guerra tan antigua, y en gente ſin Dios, ſeria yerro penſar, que ſe ha de acauar de aſentar luego la paz, fija, y ſeguramente: y aduierta vueſtra Reuerencia, que con maior, o alo menos con no menor peligro entraron los padres en los Guaycurues, y en Calchaquì, y no los mataron. Pareceme tendra vueſtra Reuerencia aduertido que los padres vayan haziendo memoria delas captiuas, y quienes ſean ſus amos, y quanto
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