poſſible, que eſtimeis tanto vna coſa que vale tampoco? y que por alcanzarla, dexeis el repoſo, y quietud de vueſtras caſas, y paſſeis tantos mares, expuetos a tantos peligros, y vengais a inquietar alos que eſtan pacificos en ſus tierras: tened verguença Chriſtianos, y no hagais caſo de eſto; pero ya que lo eſtimais tanto, yo os moſtrarè vnas tierras, donde podreis hartar vueſtro apetito; diziendo eſto apuntaua con el dedo hazia al medio dia, diziendoles, que alli verian otro mar paſſadas vnas altas ſierras, a donde verian otras gentes nauegar tambien a remo, y vela como ellos, y que paſſado aquel mar, hallarian grande riqueza de oro, de que aquella gente hazia los vaſos, y vaſijas en que bebian, y comian, y que el les guiaria, y acompañaria con la gente de ſu padre; pero que ellos era meneſter, que fueſſen mas en numero, porque hauia en el paſſo Reyes muy poderoſos, que ſe le impedirian, dando a entender con eſto la noticia que tenian del Perù, y de ſus riquezas.
Eſta fue la primera luz que los Eſpañoles tuuieron del mar del Sur, y del oro, y riquezas de ſus coſtas, con que ſe alegraron todos de manera, que no vian la hora de romper por medio, y ſalir a ver aquel mar nunca oido, y goçar de ſus theſoros. diſponeſe con eſto al punto Baſco Nuñez, ſale del Dairan a principio de Setiembre de 1513. y yendo por la mar haſta el pueblo del Cacique amigo Careca, toma el camino delas ſierras, la buelta dela tierra del Cacique Ponca, el qual aunque al principio quisò impedirles el paſſo, pero aconſejado dela gente, que el Cacique Careca hauia dado alos Caſtellanos paraque fueſſen en ſu compañia, no lo hizo, antes les embio preſentes de oro, y comidas, y gente, que los guiaſſe, y eſtos le dieron en retorno Eſpejos, Alfileres, Cuchillos, y otras coſas, de que moſtraron los Indios grande eſtima: con eſto començaron a entrara ala ſierra por ſus tierras de vn Cacique llamado Quare ua, el qual ſe puſo en arma, y ſalio al encuẽtro alos Eſpañoles. iua eſte veſtido de mantas de algodon, y todos los ſoldados deſnudos; començaron eſtos a brabear, y moſtrarſe alentados, para impedir el paſſo, alos caſtellanos, pero luegoques ſintieron el ruido, y efectos dela moſqueteria, y que caia aqui eſte, y aculla el otro, voluieron las eſpaldas, y començaron a huir como Gamos, atonitos, y eſpantados de ver el fuego, y oir las reſpuestas delos arcabuçes, que les parecian truenos, juzgando, que eran rayos los que aquella gente iua deſpidiendo deſi, o que eran demonios que venian eſcupiendo llamas, con que les dexaron el paſſo franco, para ſubir los altos montes, de donde hauian de columbrar el mar.
Hauian dicho los Indios de Careca, que deſde ſu tierra haſta la cumbre hauia ſeis ſoles de camino (que ſegun el general eſtilo delos indios, es la frace, con que ſignifican los dias) pero los caminos eran tan aſperos, que gaſtaron en llegar ala cima, veinte y cinco dias: poco antes de llegar a ella, mando Baſco Nuñez, que hizieſſe alto la gente, porque queria paraſi la gloria de ſer el primero, que huuieſſe viſto el mar del Sur; aſſi fue, llega ſolo, deſcubre aquel pielago y anchuroſos ſenos del mar pacifico: y las rodillas por el ſuelo, lleno el coraçon de ternura, y alegria;, leuanta los ojos al cielo, y dando gracias al criador de todo, por la belleza de aquella ſu admirable criatura, y por hauerle traido de tan lexos a ver lo q̃ ninguno de ſus maiores hauia viſto, haze ſeñal alos compañeros, que ſuban, y vean: corren todos aporfia, y aruin el poſtrero, llegan atropellandoſe los vnos alos otros, quando ſe vieron en lo alto, de donde ſe columbra el mar; no es dezible el contento, que todos tuuieron de ver aquella plancha terſa, y llana, y aquel hermoſo criſtal, que por no ſer animado no dio por ſu parte ſaltos de placer ni ſalio de madre por aquellas ſierras arriba, a dar la bien venida aloſque iuan a libertarle dela tirania, con que el demonio le poſſeia, infeſtandole con ſus torbellinos, y tempeſtades, y inſicionando el aire con el anhelito dela idolatria, que todas aquellas coſtas de Oriente, a Poniente, y de ſeptentrion a mediodia, reſpirauan.
O ſi las criaturas todas de aquel orbe llegaran aver cada vna de ſu lugar el bien que