Página:Histórica relación del Reyno de Chile.djvu/113

Esta página ha sido corregida
90
DEL REYNO DE CHILE.

trada, y comercio delos Eſpañoles, comian el que llaman mote, que es ſu Maiz cocido en agua ſimple, como el arroz en la India Oriental: eſte maiz ha ſido ſiempre, y es el ſuſtento mas vniuerſal de los Indios, porque no ſolo les ſirue de comida, ſino tambien de bebida, la qual hazen dela harina toſtada, o deſatada ſimplemente en agua, como hemos dicho, o cociendola, y haziendo la Chicha, que es ſu vino ordinario, el qual tambien hazen de otras frutas de arboles. El modo de hazer la harina no es como noſotros la hazemos en los molinos, ſino amano: tueſtan primero el maiz en ſus Leupes, que ſon como vnas grandes albornias de barro, eſtas ponen al fuego con harena dentro, la qual eſtando ya bien caliente, hechan el Maiz deſgranado, y meneandolo muy aprieſa con vn maço de palitos a manera de eſcoba, ſe tueſta con gran breuedad; y ſacando el toſtado, hechan otro tanto del crudo, y de eſta manera en muy poco tiempo diſponen vna gran partida, para hazer la harina. eſta la muelen fixando en tierra vna piedra como vn pliego, o medio de papel excabada en proporcion para poder jugar ſobre ella otra del tamaño de vn pan de figura ouada, eſta coge la India con dos manos, y pueſta de rodillas, la juega ſobre la otra aplicando a ſus tiempos con la mano hizquierda el Maiz entre las dos piedras, en tal diſpoſicion que ſiempre va aplicandoſe dẽtro de ellas, e q̃ baſta para que no pare la molienda; la harina va cayendo por delante en ſu manera de caxa caſi tan aprieſſa como en las de nueſtros Molinos, aunque no en tãta cantidad, porque las fuerças de vna muger, no pueden emparejar con la de la corriente, y canal de vn Molino, pero muele la que baſta para el ſuſtento de ſu caſa, para hazer la Chicha para ſus holguras, y para auiar al marido, o al hijo que va ala guerra, o haze otro viaje; y eſte officio es proprio de las mugeres, y fuera ignominia en vn hombre ocuparſe en el, ni en otros de ſus miniſterios, como ſon hazer la cocina, hilar, barrer y otras ſemejantes.

CAPITVLO IV.
Continuaſe la meſma materia.

E

N ſus enfermedades añaden los Indios muy poco, o caſi ningun regalo al ſuſtento ordinario, por lo menos no mexoran de cama. El modo de ſangrarſe, es mas ſeguro que el nueſtro, porque no es con lanceta, que tiene el rieſgo que ſe ſabe de mancar, o apoſtemar vn braço, quando el barbero es menos entendido en el arte, ſino con vna punta de pedernal muy aguda; ponen eſte en el extremo de vn palito de haſta vn palmo de largo, y alli lo aprietan eſtrechamente de mañera, que que de fuera todo aquello que baſta, y no mas para romper la vena, la qual diſponen al modo ordinario, q̃ ſe vſa en otras partes leuantar bien la vena, la qual eſtando ya bien diſpueſta, le aplica el barbero la punta del pedernal, teniendo el palito con la maso hizquierda, y eſtando bien ajuſtado, da ſobre el vn fuerte golpe con la derecha, con que la ſangria ſale mas cierta, y ſegura y comunmente es mas copioſa que las nueſtras. No paſſa de aqui la eſphera del miniſterio de barbero entre eſta gente, porque no tienen barba que hazer, por ſer de ſu naturaleza lampiños, y los pocos pelos, que les ſalen, tiene cada vno cuydado de pelarſelos, porque ſe afrentan de tenerlos en la cara; y aſſi hazen vnas como pinças de vnos choros delmar, las quales traen ſiempre conſigo, y a ratos perdidos las ſacan, y en buena converſacion eſtan arrancando los pelos, que otros con tan gran cuydado ſuelen criar, y peinar, honrrandoſe con ellos; que es buen argumento delo que haze la aprehenſion delos hombres para que vna meſma coſa ſe tenga por honrra, y por lo contrario; tanpoco tienen neceſſidad de barbero para hazerſe el cauello, porque de ſu natural coſtumbre, y vſança le traen ſiempre largo haſta des baxo dela Oreja, y no mas, y para deſpuntarlo, y que ande ſiempre e eſta medida, facilmente ſe ſiruen los vnos alos otros.
El