Página:Fundamentación de la metafísica de las costumbres (1921).pdf/68

Esta página no ha sido corregida
68
 

dantes con la desesperación, siente despego de la vida, tiene aún bastante razón para preguntarse si no será contrario al deber para consigo mismo el quisise la vida. Pruebe a ver si la máxima de su acción puede tornarae ley universal de la naturaleza. Su méxime, empero, es: hágome por egoísmo un principio de abreviar mi vida cuando ésta, en su largo plazo, me ofrezca más males que agrado. Trátases ahora de saber si tal principio del egoísmo puede ser una ley universal de la naturaleza. Pero pronto se ve que ma naturaleza olya ley fuese destruir la vida misma, por la misma sensación cuya determinación es atizar el fomente de la vida, sería contradictoria y no podria sub!

sistir como naturaleza; por lo tanto, aquella máxi ma no puede realizarse como ley natural universal y per consiguiente, contradice por completo al principio supremo de todo débenuloy Toget 2.º Otro se ve apremiado por la necesidad a pedir dinero en préstamo. Bien sabe que no podrá pagar; pero sabé también que nadie le prestará nadal como no prometa formalmente devolverlo en determinado tiempo. Siente deseos de hacer tal promesa; pero aun le queda conciencia: bastante para preguntarse: ¿no está prohibido, no es contrario al deber salir de apuros de esta manera? Supongamos que decida, sin embargo, hacerlo. Su máxima de acción sería ésta: cuando me crea estar apurado de dinero, tomaré a préstamo y prometere el pago, aun cuando sé que no lo voy a verificar nunca. Este principio del egoísmo o de la propia min