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Domingo F. Sarmiento

que á ella le ha alcanzado. Pregúntasenos ahora: por qué combatimos? Combatimos por volver á las ciudades su vida propia.

SEGUNDA PARTE

CAPÍTULO I

Infancia y juventud de Juan Facundo Quiroga


Au surplus, ces traits appartiennent au caractére originel du genre humain. L' homme de la nature et qui n'a pas encore appris á contenir ou déguiser ses passions, les montre dans toute leur énergie, et se libre á toute leur impétuosité.

ALIX, «Histoire de l'Empire Ottoman..

Media entre las ciudades de San Luis y San Juan un dilatado desierto que, por su falta completa de agua, recibe el nombre de «travesía». El aspecto de aquellas soledades es por lo general triste y desamparado, y el viajero que viene de Oriente no pasa la última «represa» ó aljibe de campo, sin proveer sus «chifles» de suficiente cantidad de agua. En esta travesía tuvo una vez lugar la extraña escena que sigue. Las cuchilladas, tan frecuentes entre nuestros gauchos, habían forzado á uno de ellos á abandonar precipitadamente la ciudad de San Luis, y ganar la travesía á pie, con la montura al hombro, á fin de escapar de las persecuciones de la justicia.

Debían alcanzarlo dos compañeros tan luego como pudieran robar caballos para los tres.

No eran por entonces sólo el hambre ó la sed los peligros que le aguardaban en el desierto aquél, que un tigre uacebado» andaba hacía un año siguiendo los rastros de los viajeros, y pasaban ya de ocho los que habían sido víctimas de su predilección por la carne humana. Suele ocurrir á veces en aquellos países en que la fiera y el