Página:Ensayosdecritica00zayauoft.djvu/414

Esta página ha sido corregida

alguna disculpa porque es fatal consecuencia de hábitos adquiridos en los trabajos de la prensa periódica. Los grandes periodistas fueron siempre hábiles en hilvanar atinadamente frases consagradas, con la aguja de relumbrón de una retórica fácil. Núñez de Arce, orgulloso de su origen y apegado á la profesión primitiva, emula á sus más brillantes compañeros y eclípsalos á veces cuando presta el relieve de la rima á fogosas peroratas.

Este género de poesía, que se podría llamar política, ejerce indudable influjo sobre las masas semicultas. La música del verso estereotipa ideas que, dichas en prosa, pasan como el viento, aun cuando es verdad que esas ideas suelen valer más por la forma que por el fondo.

Si Núñez de Arce hubiese florecido en tiempos pasados, cuando no estaban deslindados todavía los campos de la actividad humana, cuando la vida privada del ciudadano se confundía con la vida pública, cuando los