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LA MUJER €qPDOcx

cipales, provinciales y Bacionales, los nombres de aquellos de Enayor ciencia y experiencia, que serán los porta-estandartes de los nuevos tiempos, la luz de la nueva anrora feminista.

Aquellas Juntas de notables, constituyéndose con arreglo a la Carta Orgánica que se dará cado una, influirá por todos loz medios, en el ánimo del mundo femenino, para que comprome- ta, cn la acción familiar, el voto de los padres, de los esposos, de los hijos, de los hermanos, en favor de las listas de candi- datos que presenten dichas Juntas.

Estas Juntas, en los demás países, serán constituídas por me- dio de las Comisiones que representarán oficialmente al Diree- torio Central de la Revista.

Y como complemento de su alto cometido, cada una de dichas Juntas tendrá a su cargo la fundación y dirección de diarios regionales, que extenderán la obra auspiciadora de la referida Revista; obra educativa que preparará cada vez más los espíri- tus, que encanzará las voluntades, que levantará los corazones y comprometerá progresivamente el concurso universal de los hombres de pensamiento y de gobierno en favor de esos mis- mos ideales.


Interesando activa y permanentemene la labor de los in- telectuales de América en la intensificación de esta doctrina feminista, el Directorio de la Revista “La Mujer” y los Sub- Directorios correspondientes de los demás países, realizarán pe- riódicamente conenrsos literarios de novelas, artículos da re- vista y obras teatrales que exalten el triunfo, por infinitos me- Cios, de la misma doctrina (en oposición a todas las prácticas contrarias) en la vida sentimental, intelectual, social y política de todos los tiempos y países.

Es proverbial la viva afición por la lectura amena que mues- tran las mujeres, como los hombres sin preocupación ni mi- sión intelectual seria; y es sabido cuánto influye en su predis- posición espiritual y en sus gustos y tendencias personales ese género de lectura a que se entregan habitualmente. .

Se tratará, pues, de ganar a la causa de la doctrina femi- nista que representará “La Mujer” una buena parte de la ae- ividad intelectual de los literatos, que se derrama comunmen- te con tendencias menos útiles al bien público, y una mayor atención del mundo de Jos lectores de revistas y novelas en fa- var de su más pronto despertar a la acción social, y que en


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