Impulsados por un sentimiento de justicia, por la amistad sincera que profesamos á Mosén Jacinto Verdaguer y por admiración al poeta, hemos decidido reunir en este libro las cartas que acaba de publicar en El Noticiero y en La Publicidad el vate catalán, con la traducción de las mismas en castellano.
Creemos necesario é indispensable que la opinión sepa á qué atenerse, que vea patente la calumnia, y que tienda sus brazos al varón justo, arrancando de raíz la terrible especie que han esparcido por España entera sus desdichados perseguidores.
La protesta de Verdaguer es elocuente y justa; su defensa, honrada; y convencido de que el entendimiento es únicamente de Dios, no ha podido consentir que se lo arrebatasen los hombres.
A la prensa entera y al público recomendamos este libro, de gran sabor para las personas de conciencia honrada.
Afortunadamente el ilustre poeta no ha muerto para el mundo como se pretendia: el texto de este libro lo prueba, y cuantos nos honramos con su amistad lo testificamos. Dedicado otra vez á las tareas literarias, no tardará el público en apreciar el nuevo fruto de su inteligencia, fruto del mismo árbol sublime que produjo La Atlántida y Canigó.