Página:El problema feminista.djvu/18

Esta página ha sido validada
17
EL PROBLEMA FEMINISTA

por ella, por su amor, pelea el hombre.

La guerra bajo todos sus aspectos, operación táctica de ejércitos, revoluciones políticas, huelgas, atentados anárquicos, obedece siempre a este móvil recíproco en los adversarios: tentativa de uno que quiere aumentar su haber con el haber de otro, y resistencia de este último a dejarse despojar.

Mas ¿para qué quiere ese haber el hombre? Para engrandecer y embellecer su hogar, que sin la mujer no existiría. Porque es ella quien ha exigido para asegurar el éxito de su misión materna, la civilización estable del hogar. Y la pareja repite, aun en los mayores refinamientos de civilización, el estado de la caverna primitiva: ella es quien se queda dentro, el elemento permanente de civilización útil que empieza con la cocina, y de estética caracterizada en el arreglo del rudimentario menaje; él es quien sale y combate para asegurar la existencia común: el que vuelve con la presa. Faltárale aquel estímulo de estética y de bienestar, y nunca dejaría de ser un cazador salvaje.

El objeto adquisitivo de las guerras, es la apropiación de bienes desproporcionados con las necesidades de los gobernantes y