marido, dio á los parientes de este los diez reales que sacó del caballo, y se quedó con la conciencia tranquila, conservándolos cien duros que le dieron por el perro.
Un caballero muy económico, que viajaba con su criado, dijo una noche á la ventera:
— Hágame V. para cenar un huevo pasado por agua,
— ¿Y para el criado?
— Este muchacho, dijo el caballero, siempre tiene apetito; hágale V. una buena sopa con el agua en que se haya cocido el huevo.
La criada, riendo á carcajadas, dijo:
— No dejará un huevo mucha sustancia.
— Ponga V. dos, añadió el caballero, que á mí no me vendrá mal, y el pobrecillo se acostará bien alimentado con la sustancia que le dejen.
42. ¿Cuáles llaman ocasiones siendo partes de vivientes que afligen ancianas gentes, dando dolor y pasiones con humores diferentes?
43. Mi corazón es de yerba y lo demás soy gordura, que siendo mucha mas dura porque ella en sí se conserva hasta que todo se apura.
Se ata á la muela fuertemente un cordoncito de