— Doña Genara.
— Efectivamente: berlina, núm. 3.
— ¿Y los otros dos asientos?
— Están ocupados.
— Entonces no es el mió.
Espere V. espere V., dijo el empleado mirando la hoja. Interior, núm. 6.
— Bien; y los otros cinco?
— Tomados.
— Pero, señor, gritó entonces doña Genara casi desesperada; yo he mandado á mi criado que tomase tres asientos para poder ir con alguna comodidad; ¿en dónde están, dígame V. en dónde están?
— ¡Ah! ¿tres asientos para V. sola? Pues bien; no se perderán, aquí los tiene V.: uno en la berlina, otro en el. interior, y otro en la rotonda. Tres, justos y cabales, uno en cada departamento; no se ha podido servir á V. mejor.
La pobre señora se desmayó, y creo que no ha recobrado el sentido.
Una joven esposa escribía á su marido ausente:
— Tomo la pluma para escribirte, porque nada tengo que hacer, y concluyo la carta porque nada tengo que decirte.
16.
¿Qué es la cosa que displace
juntamente y dá contento?
quita la fuerza y aliento
y estos dos efectos Jiace:
dá gusto y dá, sentimiento.