Página:El ingenioso hidalgo Don Quijote del Mancha.djvu/24

Esta página ha sido validada
XVI
DON QUIJOTE.

Améla por milagro único y raro,
Y ausente en su desgracia, el propio infierno
Temió mi brazo, que domó su rabia:
Mas vos, godo Quijote, ilustre y claro,
Por Dulcinea sois al mundo eterno,
y ella por vos famosa, honesta y sabia.

DE SOLISDAN Á DON QUIJOTE DE LA MANCHA.
soneto.

Magüer, señor Quijote, que sandeces
Vos tengan el cerbelo derrumbado,
Nunca sereis de alguno reprochado
Por hombre de obras viles y soeces:
Serán vuesas fazañas los joeces.
Pues tuertos desfaciendo habeis andado,
Siendo vegadas mil apaleado,
Por follones cautivos y raheces:
Y si la vuesa linda Dulcinea
Desaguisado contra vos comete,
Ni á vuesas cuitas muestra buen talante,
En tal desman vueso conorte sea,
Que Sancho Panza fué mal alcahuete,
Necio él, dura ella, y vos no amante.

DIÁLOGO ENTRE BABIECA Y ROCINANTE.
soneto.

B. ¿Cómo estais, Rocinante, tan delgado?
R. Porque nunca se come, y se trabaja.
B. ¿Pues qué es de la cebada y de la paja?
R. No me deja mi amo ni un bocado.
B. Andad, señor, que estais muy mal criado,
Pues vuestra lengua de asno al amo ultraja.
R. Asno se es de la cuna á la mortaja:
¿Quereislo ver? miraldo enamorado.
B. ¿Es necedad amar? R. No es gran prudencia.
B. Metafisico estais. R. Es que no como.
B. Quejaos del escudero. R. No es bastante.
¿Cómo me he de quejar en mi dolencia.
Si el amo, y escudero ó mayordomo
Son tan Rocines como Rocinante?