a los objetos de adorno. Las plumas de aves son utilizadas, preferentemente en las grandes ciudades para la confección de sobrecamas, sopladores, abanicos, marcos y sombrillas. Especialidades de leñas vetadas se ejecutan en Colina, conformando peines de naranjo y en Coquimbo de guayacán. Con recortes de espejos, vidrios cortados, trozos de hojalata o de plomo se preparan, también en las urbes muchas curiosidades. Chillán ha impuesto sus modelos de zuecos en hule y madera. De Valparaíso provienen los dientes grabados (de cachalote); y como artículos cabe mencionar las maletas tejidas a telar de El Palqui (Coquimbo), las flores de carey de La Serena, los juguetes (de género) de Coquimbo, las botellas pisqueras rellenas de caliches (de diversos tonos) en Antofagasta, etc., etc.
Con afán de clasificación genérica sería menester referirse a proporciones de mayor alcurnia, coronadas, naturalmente,