Crispín, San.
Juego infantil en el que participan veinte o más niños, que se colocan en una fila circular con un paso de intervalo, y con las manos tomadas; en el centro de la fila ("taller") se sitúa "San Crispín", que trabaja afanosamente e imita lo mejor que puede el movimiento de coser zapatos, batir la suela, cortarla, abrir un agujero para enterrar los clavos, las estaquillas, o para pasar el hilo, etc., al mismo tiempo que va pidiendo las herramientas y el material que necesita en su trabajo. Así, dice: "Pásame Antonio el cuchillo, la escofina, el martillo, la horma, el cuero", etc. Mientras tanto, San Crispín observa a sus camaradas, y procura tomar al que más se ría y goce de su trabajo. Con tal fin, se levanta repentínamente, y corre a la fila, la que en el acto, comienza a girar. El niño alcanzado por el santo se sienta en el taller, y el juego continúa como la primera vez.
