STELLA ses
«Nuestra gentil maestra, nuestra adorada Alex, me ha enseñado que se debe ser lacóni- co, sobrio, natural, conciso; y guiándome por ella como siempre, quiero sintetizar nuestro pensamiento y muestro sentimiento: pido 4 todos levanten sus copas, y me acompañen 4 beber por ta ventura, por tu dicha, por tu alegría, Máximo, y repitan conmigo: ¡Viva Máximo Quiroz!
— ¡Viva! le contestaron en un grito deliran- te los demás, alzando sus copas.
-—¡Viya Máximo, el viejo tío, el padrino de Stella y de la Perla!
—¡Vival
—¡Viva el amigo de Alex, el amigo de to- dos nosotros!
—¡Vival
Alex bizo una seña, que contuvo el desbor- damiento y dijo 4 Stella:
—Mi hijita, antes de continuar los brindis, vas á beber con tus primitos por aquellas personas que ellos y tú deben recordar antes que todo, ¿Por quién, querida?. .... ¿por quién se debe brindar?
La niña miró 4 su hermana que le sonreía y levantando su copa, admirable de belleza en ese momento:
—Yo brindo con mis primitos, por abueli- ta Carmen y por tío Luis.
—Si; por papá y por mamá, gritó la Perla.
