STELLA: 100
ellos que hacen feliz á Stella. Le parecerá 4 usted extraño, que pueda sentirse por los niños otra cosa que una ternura protectora uo es verdad? Más extraño le parecerá, en- tonces, saber que el sentimiento que los míos me inspiran, es el de una profunda gratitud!
—Su tío Luis debe querer á ustedes mucho también; son las hijas de la hermana adorada, que no pudo consolarse de baber perdido... Es tán bueno, tan excelentemente bueno, Luis.
— Ah, síl es ésta la palaba; excelentemente bueno. Todos son buenos para nosotros ag Y 4 propósito: no encuentra usted muy que- brantado á mi tío?
—Lo noté en cuanto lo ví. No he querido decírselo todavía á Carmen.
—Mi tía lo atribuye á su mal estómago; pero como yo paso muchas horas con él en su escritorio puedo notar in cansancio, en
u organismo, que me alarma. Está preocu- pado por sus asuntos y negocios, .. Se de- tuvo con una vacilación en la voz, que temía avanzar. Continuó después. ... Parece. .. que no han estado perfectamente atendidos, y usted sabe que cuesta más modificar las co: sas, que empezarlas.
— También asuntos en poder de Enrique y Carlos!.... Todavía Emilio, quien 4 pesar de todo es el que más vale,
—Emilio sin apesar, señor Quiróz. Es un muchacho que será alguien porque tiene pro- pia personalidad. Yo lo estimulo y lo aliento,
