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COMO GUSTÉIS.
anciano que conversan con solemnidad. (Entran Corino y Silvio.)
Corino.—Ese es el camino para hacer que os desprecie todavía.
Silvio.—¡Oh Corino! ¡Si supieras cuanto la amo!
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Corino.—Algo de ello conjeturo; como que alguna vez he amado.
Silvio.—No, Corino. No puedes imaginarlo, siendo anciano, aunque hayas sido en tu juventud un amante tan verdadero, como el que en cualquier tiempo haya suspirado en el insomnio de la media noche. Pero si tu amor se parecía al mío (aunque estoy seguro de que jamás hombre alguno amó como yo) ¡á cuantas acciones soberanamente ridículas no te ha de haber arrastrado tu fantasía!
