Página:Don Diego de Peñalosa y su descubrimiento del reino de Quivira.djvu/38

Esta página ha sido corregida
24
MEMORIAS DE LA REAL ACADEMIA DE LA HISTORIA

muchos de estos pueblos que D. Juan de Oñate tiene en su gobierno, y otro descubrimiento que de estos y otros en más cantidad hizo el año siguiente un Antón de Espejo, Capitán nombrado en la jornada por sus compañeros, y parece que en la de Antón de Espejo se halla puesta una población que él llama de Cíbola, y refiere haber hallado vivos en ella cuatro indios de estas provincias de la Nueva España, que había llevado por intérpretes Coronado, y pone sus nombres y naturalezas, y juntamente como vecinas y anejas á ella nombra otras seis poblaciones por sus nombres, diciendo que son todas siete de una misma nación; y á las mismas, ó á la mayor parte de ellas pone y nombra Chamuscado en el descubrimiento que él hizo un año antes, y particular mención de haber estado gente y banderas de Coronado en Acoma, una población que todos sabemos ser de las que D. Juan halló, aunque sus soldados la asolaron por haberse resistido al castigo que quiso hacer sobre haber muerto á su Maese de Campo y sobrino Juan de Zaldivar, con una banda de soldados después de estar de paz. Todas estas consideraciones (obran) para sospechar que las siete ciudades de Cíbola que descubrió Fr. Marcos de Niza, en que Francisco Vazquez Coronado refiere haber estado, son parte de lo mismo en que hoy está D. Juan de Oñate, y que cuando, fuesen diferentes no tendrán otra ni más grandeza que ello, por estar cerca y en una misma altura y por la semejanza de las calidades en que lo pinta Coronado en su relación, y á esto ayuda que Vicente de Zaldivar, preguntándole yo cuando ahora pasó por aquí, si había entre aquellos pueblos alguno de este nombre, me respondió que él había estado en una población nombrada Cíbola, no lejos de la de Cummooqui yendo á descubrir la mar del Sur, de que entendió hallarse pocas leguas ó jornadas, y la hubiera visto si no se hubiera rematado de cansancio toda la caballada, y esto y otras causas le hubieran obligado á volverse, y que le pareció que sería aquel Cíbola de 170 ó 180 casas, y que debe de caer de la mar del Sur menos de 150 leguas, que todas estas particularidades no desdicen, antes ayudan á la sospecha.

 5. »En conformidad del discurso del capítulo pasado, y de que se puede hacer del poco útil que tiene la Nueva Francia á la parte de los Bacallaos por el poco pié que franceses han hecho en ella después que la descubrieron, y por lo que asimismo se sabe de las calidades de la Florida, me parece que aun siempre se dice que es gran parte de tierra incógnita la que hay de Cabo de Labrador al de Aniám; pero de la mitad que mira al Mediodia, hay buena parte de noticias contiguas que conforman y se confirman con lo que ahora se vió, y no ofrecen grandes