ti. Esos otros sean si gustan, sus Alabarderos. Sabes, ó amigo, con quánta sagacidad invadio el solio. Empezo adulando al pueblo; despues hiriendose á sí mismo, salio ante el Senado diciendo á gritos, que le habian herido sus contrarios, y suplicó le concediesen quatrocientos Alabarderos de guardia. Y ellos, no oyendo mis amonestaciones, se los otorgaron, armados con clavas; y seguidamente subyugó la Republica. En vano pues me desvelaba en libertar los pobres de la servidumbre, puesto que en el dia todos son esclavos de Pisistrato.”
17 „Creo que de ti no me vendra daño alguno, puesto que antes de tu Reynado era tu amigo, y hoy no te soy mas enemigo que los demas Atenienses que aborrecen el Estado Monárquico. Piense cada qual si le está mejor ser gobernado por uno ó por muchos. Confieso eres el mas benigno de los Tiranos: sin embargo, veo no me conviene volver á Atenas, no sea se me queje alguno de que habiendo yo puesto el Gobierno de ella en manos de todos igualmente, y abominando el Monárquico, ahora con mi regreso parezca lisonjear tu hecho.”
18 „Me causa gran marabilla tu amistad pa-