De los juicios; De las fuerzas; De las máquinas metálicas; Del hambre; De la oscuridad; Del leve y grave; Del entusiasmo; Del tiempo; Del comer y aumento; De los animales dudosos; De los animales fabulosos; De las causas; Solución de ambigüedades; Proemios a los tópicos; Del accidente; De la definición; De lo más y menos; De lo injusto; De lo primero y postrero; Del primer género; Del propio; De lo venidero; Dos catálogos de inventos; Comentarios, bien que se duda de ellos; Cuatrocientas cincuenta cartas, cuya inscripción es: Stratón a Arsínoe, obrar bien, etc.
2. Dícese que era tan delicado y débil, que murió sin sentirlo. Hay unos versos míos a él que son éstos:
- Débil era de cuerpo, aunque se ungía,
- Stratón Lampsaceno.
- Luchó continuamente
- con dolencias añejas,
- y murió sin saber que se moría.
Hubo ocho Stratones: el primero fue discípulo de Isócrates; el segundo éste de quien hablamos; el tercero fue médico, discípulo de Erasístrato o, según otros quieren, alumno; el cuarto fue historiador de los hechos bélicos de Filipo y Perseo contra los romanos[1]. El sexto fue poeta epigramático; el séptimo un médico antiguo, como dice
- ↑ Falta el quinto Stratón.