34. De tres maneras se deben exponer sus escritos. Primeramente, conviene explicar qué cosa sea cada una de las que allí se dicen. Luego por qué se dice cada una de ellas: si como principal asunto, o como parte de algún símil; para establecer dogmas, o para convencer a su adversario. Y en tercer lugar, si las tales cosas están rectamente dichas.
35. Y por cuanto en sus libros se ponen ciertas señales o signos, diremos también de ello alguna cosa. La X se aplica a las palabras y a las figuras, según costumbre de Platón[1]. El diple (doble) = a los dogmas y opiniones propias de Platón. La .X. con un punto a cada parte se pone a las sentencias más selectas y hermosas. El diple con dos puntos[2] se pone donde se enmiendan algunas cosas. El obelo con dos puntos[3] en las cosas vanas e ineptas. La antisigma con los dos puntos[4] cuando pueden dos cláusulas servir igualmente en un pasaje mismo o para alguna traslación. El ceraunio[5] se pone en las cosas pertenecientes a la instrucción filosófica. El
- ↑ A las palabras y figuras nuevas que usa.
- ↑ San Isidoro, Orig., lib. I, cap. XX, lo figura así:>:
- ↑ Su forma era ésta: -. San Isidoro lo figura así: '-; y al obelo con dos puntos lo llama limnisqus.
- ↑ Es figurado así: .). San Isidoro no pone más que la de un punto dentro. Llamábase έστιγμένον.
- ↑ El ceraunio, o digamos rayo, se figuraba de esta forma: V.