Página:Diccionario biográfico de Chile - III (1901).djvu/68

Esta página no ha sido corregida

inmediatas órdenes de los ministros Matte, Barros Luco y don Ramon Subercaseaux, ocupando el mismo cargo en la Legacion de Chile en Berlin. Ha recorrido las principales naciones de Europa y del Oriente, perfeccionándose en los idiomas frances, ingles, aleman e italiano que posee con brillo. Durante su permanencia en Europa, ha defendido siempre a Chile con lamas altiva nobleza patriótica en la prensa. En Marsella publicó un notable artículo sobre nuestro pais, ilustrando la opinion sobre su patria Dedicado a la cañera diplomática, en la que se ha iniciado con talento y la mas delicada cultura, su porvenir está trazado para continuar sirviendo a la República.

RíOS Y GUZMAN (rodolfo). —Abogado y escritor. Nació en San Felipe en 1851. Hizo sus es tudios de humanidades en el Instituto Nacional y cursó leyes en la Universidad. Obtuvo su diploma de abogado el 3 de Junio de 1875. Sus estudios fueron rápidos, dadas las condiciones de su carácter afanoso y de su intelijencia vigorosa. Se graduó de bachiller en humanidades en 1872 y en leyes, en 1874; y un año despues, se tituló abogado. Su iniciacion en la vida de servidor público fué como profesor en la Escuela Normal de Preceptores de Santiago. Mas tarde desempeñó diversas cátedras de humanidades en el Liceo de Ancud. Radicado en Quillota, se dedicó, a la vez que al ejercicio de su profesion, al periodismo, con el entusiasmo de su temperamento noble y espansivo. Redactó, en 1885, el diario El Derecho, preconizando sus doctrinas radicales.

Colaboró, con artículos de diversos jéueros literarios, en El Coi-reo de Quillota y en La Democracia de Talca. Crítico de ilustracion estensa y variada, escribió un notable y hermoso Estudio de la Novela Nacional en sus relaciones con la sociabilidad y la cultura, que le valió los aplausos de la prensa. Era un periodista erudito y laborioso, que abarcaba todos los problemas sociales y de la civilizacion con el mas levantado espíritu de cultura y de abnegacion patriótica. Sin ambiciones personales, sirvió a su partido, al desarrollo de las ideas He progreso y a la sociabilidad de Quillota, con el mas jeneroso desinteres, haciendo de la prensa su tribuna de propaganda. Perteneció al Municipio de Quillota, en varios períodos legales, poniendo en evidencia su celo y su actividad por el adelanto local del departamento. En 1891 tomó una participacion activa en la revolucion del Congreso en contra del Gobierno constitucional del Presidente Balmaceda. Triunfante el movimiento militar de Iquique, fué nombrado gobernador de Quillota, en cuyo delicado puesto se distinguió por su recto civismo y la nobleza de sus sentimientos. Guardó e hizo guardar las leyes y dió garantías a los vencidos, acordando la libertad a los detenidos políticos que se encontraban en prision. Yo mismo, desde mi refujio de vencido, en Santiago, le pedí, en mérito de nuestra antigua e invariable amistad, la libertad de un amigo, que hoi ocupa alto y merecidopuesto de honor y de confianza en la instruccion pública del ejército, en recompensa del asilo jeneroso que me diera su apreciable familia en su hogar en aquellos dias en que