Página:Diccionario biográfico de Chile - III (1901).djvu/60

Esta página no ha sido corregida

da, Antillas, Colombia, Ecuador y Perú. Observando el progreso de la sociedad y las instituciones de esos paises, escribió la relacion de sus viajes y a su regreso a Chile, la publicó en dos estensos volúmenes, precedidosdeunaintroduccion del ilustre publicistadon Benjamiu Vicuña Mackenna. En 1882 editó la imprenta Cervantes, de Santiago, en dos volúmenes, la valiosa obra titulada Viajes en torno al mundo por un chileno, en la que el señor del Rio ha descrito los paises y las costumbres que ha estudiado, aplicándoles un criterio mui independiente, libre del convencionalismo de los viajeros que pe inspiran en las guias universales. Al partir recorrió, primero, desde Valparaiso al puerto de Arica, y despues volvió al sur, para continuar su itinerario por Magallanes, pasando del Pacífico al Atlántico. A su regreso de su hermosa escursion a las cinco partes del globo, se estableció en su hacienda de Santa Fé. Unido nuevamente en matrimonio en 1887 con la bella señora doña Cármen Urrejola, volvió a emprender otro viaje a Europa, llevando del Supremo Gobierno la comision de estudiar los asilos de caridad. Cruzó la cordillera de los Andes y recorrió las pampas arjentinas; navegó por los rios del Paraguai, penetrando hasta el corazon de la América del Sur, y, por fin, visitó la isla de Cabo Verde, las Canarias, Madera, Cerdeña, Corfú, Herzegoveria, Bosnia, provincias del Rhin, Leipzig, Gotta, Hesse-Cassel, Luxemburgo. Como en su primer viajej escribió sus impresiones de los paises que visitaba, cuyos orijiuales se insertaron en 1889, en la Revista de Artes y Letras, de Santiago. Los capítulos mas interesantes, se perdieron en el naufrajio del vapor Cotopaxi, en el Estrecho de Magallanes. Mas tarde, en 1897, publicó el notable escritor don Luis Barros Méndez, en un ameno e interesante libro los Nuevos Viajes del señor del Rio, precedidos de un prólogo analítico. Este nuevo libro comprende los viajes que el señor del Rio efectuó por los rios de la Plata y Paraguai y al traves de las dilatadas provincias de Santa Fé, Entre-Rios y Corrientes, territorios del Chaco, República del Paraguai, Asuncion y Villa de Concepcion. Cuando visitó a Francia, tuvo oportunidad de rectificar opiniones erróneas sobre Chile, emitidas por los diarios Le Fígaro y Le Matin, de Paris. Es por todo concepto importante la carta que dirijió al famoso periodista Mr. Jhon Lemoine, director y redactor de Le Matin, rectificando las opiniones vertidas sobre Chile y la América del Sur, con evidente desconocimiento por los escritores franceses de la historia del continente americano, por cuya publicacion exijió mil francos Le Gaulois, en vez de pagar esa pájina de ilustrativa defensa de la cultura de América. Igual delito contra la civilizacion habría cometido la prensa de Paris si hubiese impuesto tarifa a las opiniones del patriotismo de cualquier otro americano tratándose de su pais o del hemisferio. El sentimiento de la nacionalidad ha sido una relijionpara el señor del Rio. Cuando se produjo la guerra de 1879, contra el Perú y Bolivia, ofrendó a la Municipalidad de la ciudad de Concepcion la suma de mil pesos para ofrecerla como premio al soldado que se hubiera distinguido mas en el batallon de la provincia.