188 PAULETTE PAX
hace fabricar de continuo. ¿Cuánto valdrán en el Extranjero?
En el momento de la partida presiento un in- cidente de última hora.
Estas notas... escritas día por día y francas, demasiado francas... ¿No irán a...?
Ya no contaré con la Embajada danesa para darles asilo... ¿No me registrarán?... ¿Qué dirán esos brutos, si las encuentran, si las hojean y si alguno de ellos comprende el francés?...
Tanto peor... Tengo que escribir un libro con el recuerdo punzante de estas horas.
E A 28 de Septiembre.
¡Por fin he partido!
Intentaré recordar la ansiedad de las últimas horas pasadas en Rusia.
Cuando provista del precioso pasaporte llegué a Bieliostroft, fué preciso esperar interminable- mente. :
No pude adquirir noticias. Los funcionarios no quisieron recibir a nadie. En fin, como a las cuatro, vi algunos equipajes. Me precipité a la Aduana, pero me dijeron que era demasiado tar- de para salir, que la frontera estaba cerrada y que lo único factible era regresar a Petrogrado para dormir allá.
Un soldado de buena presencia y que hablaba algo el francés, se apiadó. Algunos rublos com-
