usaron al águila, al jaguar y a la serpiente. Símbolos respectivos del Sol, La energía suprema, El Espíritu, para el primero. La Noche, la Tierra, La Materia para el segundo y la Sabiduría, El sacrificio y la Energía espiritual, para el tercero. De esta manera los Guerreros de la Batalla Florida, simbolizaban su conocimiento; como guerreros jaguares o guerreros águilas.
Finalmente les pido —dijo Serpiente de Fuego— que recorran nuestro pueblo, visiten los templos y edificios de gobierno, los mercados y sus propias casas; reconozcan los símbolos del conocimiento secreto de los Viejos Abuelos y piensen que siempre han estado aquí, esperando pacientes todo el tiempo del mundo, si fuera necesario, para el momento de su revelación."
Como en esos días bochornosos, que la tierra se calienta, las nubes se cargan, las cosas se detienen y todos esperan la tormenta. Así la atmósfera de La Casa de la Medida estaba cargada. Todos presentían que el final de la enseñanza estaba por llegar y que tendrían que abandonar su último nido, antes de emprender su propio vuelo, su propia Batalla Florida y servir a su pueblo.
En el pecho de los jóvenes se encontraban enfrentados los sentimientos de dejar por una parte a sus maestros, instructores, amigos y a su tutor; y por la otra, incorporarse a la vida de la comunidad, para servirla y desarrollar lo aprendido durante su adolescencia y juventud.
Fue entonces cuando convocó el consejo de La Casa de la Medida a una asamblea con todos los miembros de la institución, incluidos los estudiantes. El Rector entonces tomó la palabra y dirigiéndose a los jóvenes:
—Escuchen con atención, águilas y jaguares, abran las alas de su entendimiento y de su percepción. Amadas piedras preciosas, bellas plumas de quetzal, flores bellas y olorosas de nuestro más preciado jardín. Escuchen con atención, abran su mente, abran su corazón.