Página:Cuentos de la Alhambra (1833).pdf/202

Esta página ha sido corregida
(190)

el dia; mas la guarda del palacio estaba bastante descuidada por la noche, en razon de que no se temía ninguna tentativa de este género de parte del príncipe, que siempre habia llevado con paciencia su cautiverio. Con todo eso Ahmed no sabia cómo conducirse para efectuar una fuga nocturna por un pais que le era absolutamente desconocido; pero discurriendo que el buho, como acostumbrado á pasearse durante la noche, debia conocer todos los caminos escusados de las inmediaciones, pasó á su retiro para consultarle. Puso el buho un semblante grave, y dándose grande importancia, contestó en estos términos al príncipe Ahmed: «Habeis de saber, ó príncipe, que nosotros los buhos pertenecemos á una familia muy antigua