nuye el peligro harto el ofrescerse ellos de hazer y sustentar el hecho con sus fuerzas proprias, y meterse en quemar, porque demás de ser esto postrero cosa bien agena de fraude y artificio, con no querer que aventuremos gente sino sobre cosa hecha, y la qual estará en nuestra mano de querer aberiguar antes de embiar el socorro, paresce que lo que se les creyere será sobre seguro ; y quiça havrá por allá quien conozca á este hombre, y sepa dar noticia de su condicion, para sacar della alguna luz de lo que dél nos podemos prometer, tras que tambien podria V. Alta mandar hazer diligencia por saber si en effecto tienen las compañías adónde dizen, porque si esso fuesse falso, de presumir seria que tambien lo fuese lo demás, aunque bien veo que, quando bien este particular sea verdad, no por esso quedamos assegurados de la sana intencion.
Y en quanto á los hostages, no he llegado con él á ninguna particularidad de quantos y quienes havian de ser, y yo no veo á quien nos puedan dar, sino es uno ó dos de los quatro, que de alguno por allá entre los nuestros devrán de buena razon ser conoscidos, de manera que nos asseguremos que no es gente disfraçada, y todavía, si estos diessen, paresce que seria prenda de fundamento, y cierta señal que el disigno es llano, pues es de creer que no querrán venir para perderse, aunque por otra parte paresce que seria hazer falta al mismo negocio sacalle de las manos la mitad de los que lo han de poner por obra ; y ya que se aya de hazer, converná mirar mucho en como vernán, y en donde se han de meter, para que en ninguna manera puedan ser descubiertos y el negocio por ally echasse á perder. Y en quanto á la offerta particular de Paredes de embiar la muger, si bien por el sexo paresce que no es esso de tener en tanto, pues podrian presumir que quando bien nos huviessen engañado, que el ser muger havria de poder tanto con nosotros que la escusasse del castigo, todavía seria algo, sí lo biziesse, tras que en esso tambien podria haver engaño, y embiarnos el Paredes alguna moça travestida, dándole voz de muger, pues no havria en casa de Mondragon, ni aun en otra parte adónde la quieran llevar, quien la conozca y sepa dezir si en effecto es ella ó no.
