pueblos su potestad legislativa por otras manos distintas de las suyas, pero elegidas por ellos mismos; y la razon que ha tenido el Congreso Constituyente para formar otro compuesto de dos Cámaras, una de Representantes y otra de Senadores. El pueblo es el origen y el creador de todo poder; pero no pudiendo exercer por sí mismo el Legislativo, és este augusto Congreso el depositario de su confianza para este ministerio. con alty F En la amovilidad de los Representantes y Senadores no ha procurado manifestar menos cordura este Congreso.
No hay sentimiento mas natural al hombre, que el de extender el poder de que está revestido. Pero un hombre transeunte en la carrera de los empléos, no puede ser tentado con el goze de una fortuna fugitiva. Fue pues por eso, que el Congreso Constituyente puso límites á estos cargos.
Debe tambien reconocerse su prevision fixando á tiempos señalados las sesiones del cuerpo Legislativo. Ha demostrado la experiencia, y parece estar en la flaqueza natural del hombre, que una asamblea legislativa siempre en fatiga buscando materia á sus perpetuas deliberaciones, nunca puede ser tan feliz que la encuentre tal, qual ella conviene para sancionar leyes justas y proporcionadas á las públicas necesidades. En este caso la misma multiplicidad de leyes, que siempre se ha mirado como sintona de corrupcion, las desnuda de ese carácter sagrado que comunica su importancia unida a su singularidad.
Siguiendo el plan que se habia trazado el Congreso Cons tituyente, como encargado para levantar el edificio social, precedió a la creacion del Poder Executivo. Todo quanto puede influir á cautivar el entendimiento le habia persua-