canos y entre los Españoles algunos espiritus inquietos, los quales procuraron con razones de especiosa política estorbar su execucion. Los primeros decian, que ella no era otra cosa que una maquina inventada para, apartarlos del manejo de las armas, y luego sorprenderlos con mas segundad. Los otros al contrario, mostraban temer que cesando la guerra se multiplicasen demasiado aquellos formidables nacionales, y se hiciesen muy poderosos para destruir los establecimientos Españoles que todavia quedaban en Chile. Así algunos entre estos tuvieron el atrevimiento de gritar al arma, y de instigar á los auxîliares para volver á empezar las hostilidades en el tiempo mismo de las conferencias. Pero el Marques justificandose con los unos, y reprimiendo los otros, dió la ultima mano á su gloriosa empresa, la qual fué aprobada y ratificada de la Corte.
De quanta utilidad fuese para los Españoles el artículo añadido por él al tratado de paz, se vió en el último esfuerzo que dos años despues hicieron los Holandeses para echarlos de Chile.1643. Las medidas de estos habian sido tambien tomadas, que por poco que los Araucanos se hubiesen prestado á ayudarles, hubieran infaliblemente conseguido el deseado intento. Partidos del Brasil, que ya tenian sojuzgado, con una numerosa flota, bien provista de gente y de artillería, ocuparon el ex-Página:Compendio de la historia geografica natural y civil del reyno de Chile - Parte II.djvu/312
Esta página ha sido corregida
288
Compendio de la Historia civil
ce-