y desafio á batalla singular en el termino de tres dias al Comandante de la plaza, que era el mismo Garcia Ramon ya echado de Arauco. Aceptado el desafio, el atrevido
Toqui compareció en el campo el dia prescrito con moderado séquito que dexó aparte. El Comandante Español le salió al encuentro con quarenta hombres, que igualmente colocó en alguna distancia. Los dos campeones, aplicando las espuelas á los caballos, se acometieron coa tal furia que el primer golpe decidid de la batalla.
Cadeguala, atravesado de parte á parte por la lanza de su competidor, cayó moribundo en tierra; no obstante de esto, rehusando confesarse vencido, tentó volverse á poner á caballo, pero la muerte se lo impidió. Sus soldados corrieron á levantar el cuerpo, el qual conduxeron consigo despues de alguna oposicion que tuvieron de los Españoles. El exército se retiró de la plaza con ánimo de volver á ella quando se hubiese creado un nuevo Xefe.