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el lenguage, por ser en latin y en romance, solo pudo decir esto dicho autor, instigado del prurito de satirizar; pues, como observa el cronista Fuentes, para esto era necesario que los enunciados Clérigos no supiesen hablar ni el latin, ni el castellano, porque de saber alguno de los dos idiomas, en él hubieran enseñado la doctrina á los Tequeguas. Estos indios fueron trasladados al pueblo de Amatique, donde aunque murieron muchos, subsistieron algunas familias de su estirpe por mucho tiempo.

Estuvo la provincia del Golfo Dulce, por lo espiritual, á cuidado de la Religión de la Merced, que tenia un Convento en el pueblo de Amatique; pero habiéndose despoblado la Nueva Sevilla, viéndose estos Religiosos espuestos á las incursiones de los piralas y sin el recurso de los Españoles de dicha población, que con sus limosnas ayudaban á mantener el Convento, hicieron dejación de esta doctrina en manos del Ilustrísimo Señor Don Cristóval de Pedraza, Obispo de Trujillo, el año de 1549; y este Prelado puso Cura que administrase los referidos pueblos y el castillo. Mas en el dia de hoy, estinguido este Curato, administra en el castillo un Capellán, que nombra el Arzobispo de Guatemala. Por lo temporal gobernó la provincia de Amatique, primero el Teniente de Gobernador de la Nueva Sevilla, después el Alcalde mayor de Amatique, que nombra el Presidente de Guatemala, y al presente el Castellano del Golfo.

Lo que hace mas digna de atención la provincia de Amatique es tener en su territorio el Golfo Dulce, en donde de muchos años á esta parte se hace la descarga de los barcos que vienen de España. Esta se hizo al principio, por el tiempo de casi 80 años, en Puerto Caballos: aqui descargaba la que llamaban Flotilla de Honduras; pero fueron tantos los robos y daños que hicieron los piratas en este puerto indefenso y espuesto á sus hostilidades, que obligaron al M. N. Ayuntamiento de esta ciudad, á que repetidas veces hiciese las mas activas diligencias con los Sres. Presidentes, para que se buscase otro puerto mas resguardado de los insultos de los corsarios, y mas fácil de ponerse en estado de defensa. Pasáronse