Página:Compendio de la Historia de la Ciudad de Guatemala Tomos I - II.pdf/505

Esta página ha sido corregida
—121—

ción. Siendo Prior de Coban dicho Religioso, envió á visitar á los Acaláes á Fr. Alonso Vaylló y á otros Padres: no pasándose mucho tiempo sin que fuesen á predicarles los conventuales de Coban. Pasado el trienio de su Priorato, volvió el P. Vico á la provincia de Acalá, y trabajó mas de lo que se puede imaginar, en reducir á sus habitantes á que viviesen en pueblos, para que pudiesen ser doctrinados, no cesando este bendito Varón de procurar el bien espiritual de estos indios, hasta lograr, en premio de su zelo apostólico, la corona del martirio el dia 29 de Noviembre do 1555. El P. Remesal, de quien hemos tomado estas noticias, no vuelve á hablar de los Acaláes, después de la muerte de Fr. Domingo Vico, lo que nos hace creer que no se ha hecho otra tentativa, para conseguir su reducción.

Hállase también inmediata á la Verapaz la provincia del Manché, cuya reducción es como vamos á decir. (Remesal, lib. 11 cap. 18, 19 y 20). Como por lós años de 1570, vinieron algunos indios principales de esta nación al pueblo de Coban, y habiendo sido muy bien recibidos y acariciados del Señor Don Fr. Tomás de Cárdenas, Obispo de Verapaz, y de los Religiosos, acudian con frecuencia al pueblo de Cahabon, que es el mas cercano á sus tierras: con esta ocasión los Padres los instruían en los misterios de la fé católica, exhortándolos á que la recibiesen; mas ellos respondían que se verían en ello y lo pensarían. De esta manera se mantuvieron los indios del Manché indecisos en abrazar la religión cristiana, hasta el año de 1605. Por este tiempo se hallaba de Presidente el Doctor Alonso Criado de Castilla; y habiéndose juntado los Religiosos de Santo Domingo, á celebrar capítulo en el Convento de Sacapulas, les escribió encargándoles encarecidamente se tomase con empeño el negocio de la reducción del Manché. Tratóse con gran calor en este congreso sobre los medios que serían mas convenientes para efectuar la conversión de los espresados infieles; y de resulta de estas conferencias, se mandó al P. Fr. Juan de Ezguerra, que con la mayor presteza y eficácia entendiese en este negocio. El 25 de Abril de este año salió de Cahabon el referido P. Ezguerra,