Página:Compendio de la Historia de la Ciudad de Guatemala Tomos I - II.pdf/177

Esta página ha sido corregida
—169—

cido 12,000 pesos para dicha fundacion, y se nombró por Prior á Fr. Gaspar Suarez, dándole por compañero a Fr, Francisco Zúñiga. Establecióse el Convento en un sitio incómodo y malsano, por lo que el año de 1615 se trasladó á las casas que dejaron las Religiosas de Santa Catarina Mártir, siendo Prior el Padre Fr. Antonio de Alderete. Este zeloso Prelado adelantó mucho el Convento, habiendo traido Religiosos, aumentado oficinas y albajas y fincádole 8,500 pesos. En dicho sitio permaneció la casa hasta el año de 1625, en que el Señor Don Fr. Juan Zapata, encomendó á esta Religion la ermita de Nuestra Señora de los Remedios; mas no habiéndolo aprobado Su Magestad, se restituyó el Convento al lugar que habia dejado, donde se conservó hasta la ruina de la Antigua Guatemala. Se ha leído algunas ocasiones en él, Filosofía y Teologia; pero no ha durado esto mucho tiempo, por el corto número de sus individuos.

El sesto, es el de los Religiosos de San Juan de Dios, fundado el año de 1636. Pertenece este Convento á la Provincia del Espíritu Santo de Méjico, y el Prior de Guatemala es Vicario Provincial respecto de los cinco Conventos de dicho orden, que hay en este Reino y son el de Ciudad Real, Leon, Comayagua, Granada y Sonsonate. A cuidado de estos Religiosos están en el dia todos los Hospitales que tiene esta Ciudad, (escepto el de los convalescientes,) y todos se han unido, aunque con separacion de salas, en el Convento de San Juan de Dios. Éstos son tres: el de Santiago, donde se curan los españoles y mulatos: el de San Alejo, para indios; y el de San Pedro, para Eclesiásticos. El primero lo fundó y edificó á su costa el Señor Marroquin, primer Obispo de esta Ciudad, por los años de 1553. Y habiendo dicho Señor Obispo ofrecido al Rey el patronato del citado Hospital, Su Magestad, en cédula de 29 de Noviembre de 1559, dió orden á la Real Audiencia, para que admita en su Real nombre el espresado Patronato mandando que, desde aquel dia, se llamase el Hospital Real de Santiago, y asignándole 1,000 pesos de renta. El segundo se edificó por el caritativo Padre Fr. Matias de Paz, Religio-
 Juarros.—Tomo I. 12