Página:Cantico de Navidad.djvu/71

Esta página ha sido validada
— 51 —

tropezado en el techo. En cuanto lo vió Scrooge no pudo menos de exclamar lleno de agitacion:

—¡Pero si es el viejo Feziwig! Dios lo bendiga. Es Feziwig resucitado.

El viejo Feziwig abandonó la pluma y miró el reloj: señalaba las siete de la noche. Se restregó las manos, se arregló el inmenso chaleco, y riéndose bonsachonamente desde la punta de los piés hasta la punta de los cabellos, llamó con poderoso, sonoro, rico y jovial acento:

—Hola; Scrooge; Dick.

El otro Scrooge cenvertido ahora en un adolescente, acudió presuroso acompañado de su camarada de aprendizaje.

—Es Dick Vilkins á no dudarlo, dijo Scrooge al espíritu... Es él. Hélo ahí. Me queria mucho ese pobre Dick.

—Ea, ea, hijos mios, grito Feziwig: esta noche no se trabaja. Es la Noche Buena Dick; es la Noche Buena, Scrooge. Prontito, colocad los tableros en las ventanas, continuó Feziwig haciendo chasquear sus manos alegremente. Pero pronto. ¿Aún no habeis concluido?

Es imposible figurarse como ejecutaron la órden las jóvenes. Corrieron á poner los tableros, uno dos y tres... los colocaron en sus respectivos sitios, cuatro, cinco, seis... despues las barras, despues las chavetas, siete, ocho nueve... y volvieron antes de