que los cabrones son los que las pagan
después de bien sobadas del marido;
que aun siendo un menestral obscurecido
le hace antesala un grande su vasallo,
le tributa y se esmera en agradallo,
para lograr con susto y á gran precio
los heces que á su vicio le han sobrado.
Hay varias clases de estos picarones;
unos del pueblo y otros que se juzgan
del solar de los godos descendientes,
porque los cuernos son como los dientes
que duelen al salir, pero en llegando
con ellos á comer, los quieren todos:
mas la madera que se cría andando
la peinan muchos por diversos modos,
y es tan cabrón el que es cabrón de cuernos
como el magnate con sus cuernos de oro.
Por eso hombres verás como camellos
que apreciarás tratar con sus mujeres
á todas horas, más que no con ellos,
y si por dar lugar á los quehaceres
de la consorte, salen á la Puerta
del Sol, para hacer tiempo, y á su casa
vuelven tosiendo á la hora que conciertan,
dignos de que las iras se conviertan
de la justicia, no contra las pobres
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ARTE DE LAS PUTAS