LUCRECIA CENTENO DEL CAMPILLO
Pero el astro de rayos luminosos Que extasiada solía contemplar,
¿En dónde está? Mis ojos al no verlo
De pena llorarán.
Se secaron las rosas, las palomas
Al morir me negaron su cantar;
Y la estrella brillante de los cielos Perdió su claridad.
Pero nunca en el fondo de mi pecho,
La luz de la esperanza morirá;
¡Todo no muere! El alma vive libre Allá en la eternidad.
A NUESTROS HEROES
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En el Album del Colegio Profesional
de Córdoba.
Libertadores, Mártires, Guerreros, Estadistas, Apóstoles, que fieros, Recorrísteis la senda de la gloria Derramando a raudales La luz de vuestros hechos inmortales: Nobles Patricias, cuya augusta frente Nimba un rayo de luz resplandeciente, Y vosotros, poetas,
Cuyo estro sobrehumano,
Cantó con voz ardiente y poderosa
La libertad del suelo americano, ¡Gozad la paz! La Patria esclarecida Que inspiró vuestras ínclitas proezas, Marcha triunfante al porvenir, ceñida De verdes lauros, que en afán, prolijos, Ofrendan a la madre soberana.