JULIA BUSTOS
Después de esa visión, te juro, hermana, que me siento más lírica y más buena; es como si me hablara su alma santa para alegrar la mía en su tristeza.
¡Dejemos todo así! Quitemos sólo
el polvo de los muebles. como si ella hubiera de volver después de un viaje penoso y largo que nos trajo pena, que inundó de tristeza nuestras almas porque temimos no volver a verla.
Y volvamos aquí cuando tengamos necesidad de fe y de fortaleza.
ELOGIO DEL SUEÑO
Bendito seas, sueño sagrado
que a poco llegas hasta mis párpados; piadoso y bueno, eres el bálsamo
que cura todos los desengaños.
Cuando esté enferma, cuando el desmayo, trueque a mi espíritu en un esclavo, cuando mi cuerpo sea un harapo
que los dolores hagan pedazos,
cuando mis alas, viejas o heridas ya no puedan escalar lo alto, cuando me venza tanto cansancio que ya no pueda decirle “te amo”,
entonces sueño, ven para siempre, yo soy tu novia, te espero siempre, querré ser tuya, entonces siempre y entre tus brazos soñaré siempre.
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