UNA PELICULA MENTIROSA
El Grito Silencioso es una película de 28 minutos que muestra un aborto filma- do mediante la cámara de ultrasonido*: un feto de 12 semanas que supuestamen- te grita de dolor mientras una cánula de succión lo aspira del útero. Lo que en realidad se ve son confusas imágenes en blanco y negro. En la banda sonora, la voz del Dr. Bernard Nathanson manipula la narración para trasmitir su mensaje: “el feto es igual que un ser humano adul- to, el feto siente dolor”.
Aunque el Dr. Nathanson se ha visto obligado a reconocer que la imagen del feto está magnificada al tamaño de un bebé y que la película está en partes tru- cada para cear efectos especiales, igual hay pocos elementos para distinguir un niño o un grito en la pantalla.
Entre los errores y distorsiones más graves de la película, la comunidad cien- tífica norteamericana ha señalado los si- guientes:
--el cortex (materia gris que recubre el cerebro) de un feto de 12 semanas no es- tá suficientemente desarrollado para sen- tir dolor. La percepción consciente apa- rece recién en el tercer trimestre.
- ultrasonido: técnica donde una computadora
traduce a una imagen las ondas de sonido prove- nientes del útero.
Alternativa Feminista
LA VERDAD SOBRE EL GRITO SILENCIOSO
—es imposible identificar “la boca” del feto en la imagen del ultrasonido. Los pulmones no pueden contener aire; por tanto, médicamente no puede haber “grito.
—el movimiento fetal que la película sostiene es realizado para “escapar a los intrumentos del abortero” es en realidad movimiento reflejo y casual, como en cualquier organismo primitivo.
los intrumentos de Nathanson des- “cribe con horrible detalle como necesa- rios para “aplastar la cabeza del feto” (con sonido como de cascanueces sobre- impuesto) no son utilizados en un aborto de 12 semanas.
—=i bien se han registrado impulsos eléctricos, ningún feto de 12 semanas “tiene ondas cerebrales. Estas, así como los centros cerebrales necesarios para el pensamiento, aparecen en el tercer tri- mestre.
—el modelo, muñeco fetal, con que ejemplifica Nathanson es mucho mayor (40 cms.) que el feto mostrado en la pan- talla (6 cms., magnificado) y por tanto lleva a error. Muchos de los fetos mostra- dos en la película como producto de abortos tempranos provienen de partos prematuros, abortos espontáneos de úl- timo trimestre o bebés nacidos muertos — que la película muestra amontonados en tachos de basura.
no hay pruebas de que un aborto realizado en condiciones seguras provo- cue infertilidad a consecuencias nsicoló-
