nocerse. Los navegantes no fueron arrojados allá por la casualidad de los vientos, como llegaron á Islandia, Naddod y Gardar, ó como Gunnbjern, el hijo de Ul£f Kraka, tocó en la Groenlandia. Colon no pudo tampoco guiarse por estaciones intermedias. Verdad esque el gran cosmógrafo de: Nuremberga, Martin Behem, que acompañó al portugués Diego Cam en su importante espedicion á las costas occidentales del Africa, pasólos cuatro años de 1486 4 1490 en las islas Azores; pero no fue descubierto el Continente americano partiendo de estas islas, situadas á los */, de la. distancia entre las costas de España y las de Pensilvania. La premeditacion de esta gran obra está ya celebrada de una manera poética en las estancias del Tasso. El poeta habla de aquello á que no se atrevió el valor de Hércules:.
Non osó di tentar 1" alto Uceano:
Segnu le mete, e n troppo brevi chiostri L" ardir ristrinse dell" ingegno umano..... Tempo verra che fian d'Ercole i segni Favola vile ai naviganti industri.....
Un uom della Liguria avra ardimento
Al? incognito corso esporsi in prima.....
Gerusalemme liberata, XV, estrofas 25, 30 y 31.
Y sin embargo, el gran historiador portugués Juan Barros (36), cuya primera Década no apareció hasta 1552, nada tiene que decirnos acerca de aquel «uom della Liguria, » sino que era un frívolo y estravagante charlatan (homem fallador, e glorioso em mostrar suas habilidades, e mais fantastico, e de imaginacoes com sua Ilha Cypango).. ¡Tan cierto es que en todos los siglos y en todos los grados: de civilizacion, los odios nacionales se han esforzado por oscurecer el brillo de los nombres ilustres!
El descubrimiento de las regiones tropicales de la Amé rica por Cristóbal Colon, Alonso de Ojeda y Alvarez Cabral,