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á nuestra vista en rocas llegadas ya á cierto grado de solidificacion, nos enseñan de qué manera se han formado los filones metálicos y pétreos en las primeras edades geológicas, donde quiera que la corteza sólida de nuestro planeta, de poco espesor á la sazon, frecuentemente conmovida por las sacudidas, quebrada y fracturada en todos sentidos á consecuencia del enfriamiento y del cambio de volúmen, presentaba comunicaciones numerosas con el interior, y salidas multiplicadas á los vapores ascendentes y á las sublimaciones de toda especie. La disposicion de las partículas en capas paralelas á las salbandas, la repeticion regular de las capas homólogas en las partes opuestas de la vena (el techo y la pared) y la cavidad celular prolongada de la parte media, nos hacen reconocer luego al punto en un gran número de filones metalíferos el acto plutónico de la sublimacion. Como las y venas penetrantes son de orígen mas reciente que las capas penetradas, los yacimientos relativos del pórfiro y de las formaciones argentíferas de las minas de Sajonia, las mas ricas de toda Alemania, prueban que las formaciones son al menos mas recientes que los troncos de árboles del terreno hullero y del nuevo asperon rojo inferior (Rothliegendes) (91).

Fecunda inspiracion ha sido en verdad para la teoría de la formacion de la corteza terrestre, y para la del metamorfismo la feliz idea de comparar los minerales naturales á las escorias de nuestros hornos de fundicion, y procurar reproducirlos en todas sus partes (92). En efecto, todas estas operaciones nos ofrecen la accion de las mismas afinidades que determinan las combinaciones químicas, así en los laboratorios como en el seno de la tierra. Entre los minerales formados artificialmente, se han encontrado los simples mas importantes de que se componen las rocas de erupcion plutónicas ó volcánicas y las metamórficas, no ya imitados toscamente, sino reproducidos en el estado cristalino