yo astronómicamente á 3600 metros bajo el nivel del mar, el punto (7° 1' lat. aust. y 80° 54' long. occid.) en que el Ecuador magnético corta la cadena de los Andes entre Quito y Lima. Al Oeste de este punto, el Ecuador magnético atraviesa casi todo el mar del Sud en el hemisferio austral y se aproxima lentamente al Ecuador terrestre. Poco antes de llegar al archipiélago Indio, pasa al hemisferio septentrional, toca únicamente las estremidades meridionales del Asia, y penetra en seguida en el continente africano al Oeste de Socotora, hácia el estrecho de Bab-el-Mandeb, siendo entonces cuando se separa mas del Ecuador terrestre. Despues de haber atravesado las regiones desconocidas del interior del continente africano en direccion al Sud-Oeste, el Ecuador magnético vuelve á la zona austral de los trópicos hácia el Golfo de Guinea, separándose entonces de tal modo del Ecuador terrestre, que va á cortar la costa brasileña hacia Os Ilheos, al norte de Porto Seguro, á los 15° de latitud austral. Desde allí á las mesetas elevadas de las cordilleras, en que he podido observar la inclinacion de la aguja, entre las minas de plata de Micuipampa y la antigua residencia de los Incas, Caxamarca, recorre toda la América del Sud; vasta region, que por aquellas latitudes es aun para nosotros una terra incógnita, magnética, como el África Central.
Por recientes observaciones, recogidas y discutidas por Sabine (56), sabemos que desde 1825 á 1837 el nodo de la isla de Santo Tomás se ha adelantado 4° de Oriente á Occidente. Seria de suma importancia averiguar si el otro nodo, situado en el mar del Sud, hacia las islas de Gilberto, ha retrocedido al Oeste otro tanto, aproximándose al meridiano de las Carolinas. Bastan estas consideraciones generales para hacernos ver, cómo los diferentes sistemas de líneas isoclínicas se ligan á la gran línea sin inclinacion, cuyas variaciones de forma y posicion cambian las latitu-