dad del cometa de 1378 con el de Halley. (56) De 1378 á 1835, el tiempo de la revolucion del cometa de Halley ha variado de 74,91 á 77,58 años; siendo el período intermedio de 76,1.
Esta clase de cometas contrasta con otro grupo de astros del mismo género, cuyo período siempre incierto y difícil de determinar, abraza muchos miles de años. Tales son entre otros, el bello cometa de 1811, que emplea 3,000 años segun los cálculos de Arlegander, en verificar su revolucion, y el sorprendente de 1680, cuyo tiempo periódico pasa de ochenta y ocho siglos, segun Encke. El primero de estos astros se aleja del Sol ventiun radios de la órbita de Urano, y el otro, cuarenta y cuatro, ó sean respectivamente 6200 y 13000 millones de miriámetros. La fuerza atractiva del Sol alcanza, pues, aun á estas enormes distancias; pero debe tenerse en cuenta que el cometa de 1680 recorre 393 kilómetros por segundo en su perihelio, cuya velocidades entonces trece veces mayor que la de la Tierra, al paso que en su afelio se mueve apenas á razon de 3 metros por segundo próximamente; velocidad casi triple de la que llevan los rios de Europa, é igual á la mitad de la que he comprobado en un brazo del Orinoco, el Cassiquiare. Entre los cometas que no han podido calcularse, y en el número inmenso de los que han pasado desapercibidos, deben ciertamente encontrarse algunos cuyo eje mayor exceda bastante del de 1680. Limitándonos á este último, citaremos algunos números por donde pueda formarse idea, no de la estension que abraza la esfera de atraccion de los otros Soles, sino únicamente de la distancia que los separa aun del afelio, ya de por sí tan remoto, de dicho cometa. Segun recientes determinaciones del paralaje de las estrellas mas próximas, distan estas del Sol doscientas cincuenta veces mas que el afelio del cometa de 1680; porque esta última distancia equivale á cuarenta y cuatro radios de la órbita de Ura-